12 de Octubre, Día de la Raza, de la Hispanidad. ¡Viva siempre España!
«¡Por España!
y el que quiera defenderla,
honrado muera.
Y el traidor que la abandone,
no tenga quien le perdone,
ni en Tierra Santa cobijo,
ni una cruz en sus despojos,
ni las manos de un buen hijo
para cerrarle los ojos.»
(Audio del himno nacional cantado)

¡¡Arriba España!!
¡SIEMPRE!
Celebro que se haya reproducido en este artículo el himno de España cantado.
Uno de los mayores logros de la propaganda mentirosa de los enemigos de España y de la Civilización Cristiana, falsedad en la que participan por igual comentaristas deportivos, cadenas de televisión y tontos varios, es el haber hecho creer a una gran masa de españoles que el Himno de España no tiene letra.
Esto no es verdad.
El Himno de España tiene letra, y no es una letra «franquista» como dicen de mala fe los enemigos de España y repiten como bobos los tontos que se dejan engañar por ella, sino muy anterior a Franco.
No hay ningún problema porque la letra fuera «franquista», pero simplemente es que no es el caso y hay que contar la verdad, otra cosa es que en época de Franco se respetara la letra del Himno que como digo es muy anterior.
La Letra del Himno nacional, -esta que se puede escuchar en este audio que con acierto ha publicado en día tan emblemático el Español Digital, recordando que el Himno, como la Bandera, representan a España-, la escribió el poeta José Mª Pemán en 1928, casi una década antes del Franquismo, y lo hizo porque un año antes, en 1927, el también poeta Eduardo Marquina, cumpliendo el encargo del Rey Alfonso XIII escribió una primera letra del himno con ocasión de las bodas de plata del monarca.
El problema no es que el himno de España no tenga letra o que ésta sea franquista, el problema es que el autor de “Lo que María guardaba en su corazón” (José Mª Pemán) es un autor cristiano, en el sentido verdadero del término (no en el sentido falso que pretende la anti-España), y además se salvó de milagro de ser asesinado durante la Segunda República porque era diputado por Renovación Española (el partido de Calvo Sotelo, sacado de su domicilio de madrugada mediante engaño prevaliéndose de su condición mandos policiales y asesinado, el 13 de julio de 1936, por pistoleros del gobierno rojo del Frente Popular de la República del Crimen, lo que precipitó la Cruzada de Liberación porque decidió ya a los indecisos de que era preciso poner fin a aquel sistema criminal que fue la República del Frente Popular salida de un doble pucherazo en las elecciones, en las municipales de 1931 y en las generales de febrero de 1936), y eso es lo que no se perdona del himno, a su autor, y para quitarlo y desterrar aún más de la vida pública a todo poeta que no sea del Frente Popular (como están desterrados de las televisiones y de los teatros Enrique Jardiel Poncela, Manuel Machado, los Hermanos Álvarez Quintero, Alfonso Paso, Carlos Arniches, Miguel Mihura, Agustín de Foxá, Joaquim Borrás, Ramiro de Maeztu, Muñoz Seca, Rubén Darío, David Jato, Luys Santa Marina, Fermín Yzurdiaga, Dionisio Ridruejo, la escritora Concha Espina y su hijo Víctor de la Serna, Carmen de Icaza, Mercedes Fórmica, y un larguísimo etcétera de escritores silenciados para aparentar que la Cultura es patrimonio de la izquierda), y para privar a los españoles de los sentimientos de un himno con letra cargada de amor a España, a sus valores trascendentes, y a los españoles, se engaña de forma sectaria diciendo que el himno no tiene letra o que la letra es «franquista», y además lo dicen todos los medios al unísono, a los que se unen los comentaristas deportivos y toda clase de tontos útiles a los enemigos de España, y cuando hay esa “uniformidad” y esa “unanimidad” pareced evidente que están obedeciendo una consigna orquestada.
Si en vez de José Mª Pemán lo hubiera escrito García Lorca o Alberti, entonces no habría problema.
Por tanto, no es verdad que el Himno de España no tenga letra, esto es otra cosa de las que se dicen en España por razones de propaganda. No sólo tiene letra sino que tiene 2 letras oficiales, una es la Letra que le puso el poeta Eduardo Marquina en 1927, y otra la que un año más tarde le puso el también poeta José Mª Pemán. Esta última es la que se cantaba en tiempos de Franco. Es lamentable que en los medios de comunicación, sobre todo en los Telediarios con ocasión de acontecimientos deportivos donde se toca el Himno de España, se diga que el himno no tiene letra, y muy triste que los deportistas y la mayoría de la gente en la actualidad, confiando en lo que de forma unánime dicen los medios de comunicación que en realidad lo son de manipulación y engaño porque sirven al rey de la mentira que es Satanás, se traguen como verdad lo que es una pura patraña y falsedad, debido a los efectos del proceso de aculturización y de propaganda mentirosa que se viene sufriendo en España desde hace más de 50 años y que cae sobre nosotros como una lluvia ácida de tergiversación, falsificación y guerra psicológica para engañar a los españoles y de este modo tenernos maniatados y teledirigidos. Como consecuencia del monopolio de la Educación y de los medios de comunicación en manos de los enemigos de España y la Europa Cristiana.
A José Mª Pemán se le odia porque fue un escritor cristiano, es el autor del libro sobre la Virgen María «Lo que María guarda en su corazón», y sobre la «Navidad», entre otros muchos, y es autor del Poema al Cristo de la Buena muerte:
«Al Cristo de la Buena Muerte
Cristo de la buena muerte,
¡el de la faz amorosa,
tronchada, como una rosa,
sobre el blanco cuerpo inerte
que en el madero reposa!
¡Cuerpo llagado de amores
yo te adoro y yo te sigo!
Yo, Señor de los señores,
quiero partir tus dolores
subiendo a la cruz contigo.
Quiero, en santo desvarío,
besando tu rostro frío,
besando tu cuerpo inerte,
llamarte mil veces mío…,
¡Cristo de la Buena Muerte!
A ofrecerte, Señor, vengo
mi ser, mi vida, mi amor,
mi alegría, mi dolor;
cuanto puedo y cuanto tengo;
cuanto me has dado, Señor.
Y a cambio de esta alma llena
de amor que vengo a ofrecerte,
dame una vida serena
y una muerte santa y buena…
¡Cristo de la Buena Muerte!»
José Mª Pemán es el autor también de la letra del Himno de la Armada cuando ésta era «Armada Española» (y no estaba como ahora para ayudar a los cayucos que envía el tirano de Marruecos para invadir las Canarias), que es un Himno precioso, con muchas notas de Hispanidad, y que cualquier día lo prohíben también sólo porque su autor es José Mª Pemán o porque ensalza a España.
Amén, compatriota de bien.
Como el amor a la mujer, al hijo, al amigo, a los padres, o como el amor supremo a Dios, el patriotismo es un modo de amar. Cuando un patriota dice «España» expresa una suerte de amor que, en tanto amor, es inseparable de su fuente, que es Dios, y así se eleva por encima de las pasiones nocivas y del egoísmo. ¿Cómo esperar que lo comprenda un renegado, un comunista o un ateísta militantes, si éstos no quieren bien a nadie y sólo procuran para sí mismos ? ¿Cómo sabrán nunca de la vida y la belleza los abostirtas, los satanistas, los que reniegan de Dios? Los más depravados rechazan cualquier noble deseo humano y así consiguen asfixiar su corazón; entonces, después de haber destruido a otros, se suicidan.
Pero no todo está perdido. Unos pocos desean ser buenos cristianos y españoles; a esos les digo:
¡Viva España y quien la defiende!
¡Viva Cristo, Rey de España!
Amén, ¡ARRIBA ESPAÑA SIEMPRE!
¡ARRIBA ESPAÑA SIEMPRE!