A vueltas sobre el Col. Pérez de los Cobos
En relación con mi artículo de hace unos días titulado «La sentencia sobre el Col. Pérez de los Cobos: jaque al Estado de Derecho» (AQUÍ) tengo el placer de transcribir, a pesar de su extensión, dos aportaciones recibidas. Una de un comentarista al artículo (Kevlar Steiner) y otra por correo electrónico de un seguidor (Col. Efrén Díaz). Tras ellas haré unas muy breves reflexiones.
La del comentarista:
«Hasta aquí todos de acuerdo, pero esto es una cosa y otra muy diferente presentar al Coronel Pérez de los Cobos como un héroe o una víctima inocente de todo esto, porque en eso no estoy de acuerdo.
El Coronel Pérez de los Cobos es uno de tantos, que se acuerda ahora de la «Justicia» cuando le toca a él, y de la bandera y del patriotismo, pero que ha colaborado con los enemigos de España como todos los demás, con escasísimas excepciones. Haber si el día de mañana le van a hacer una jugada al General Santiago, – aquél que salió por televisión diciendo que la Guardia civil trabajaba para MINIMIZAR en las redes sociales las críticas al Gobierno-, y a alguien se le va a ocurrir darle pena y salir haciendo un artículo como éste para defenderlo.
El Coronel Pérez de los Cobos es ese señor vestido de paisano, como si en lugar de ser Coronel de la Guardia Civil fuera agente de Seguros, que como un pasmarote se prestaba a la farsa de acudir a las reuniones con el Gobierno separatista de Puigdemont, formando parte junto con otros ineptos como el Secretario de Estado de Seguridad entonces José Antonio Nieto, (el clásico pijo cordobés del PP, que tiene su carrera de Derecho y está dado de alta como abogado pero que si tuviera que vivir de la abogacía la mitad de los días no comía, con el talento justo para acarrear pavos, que por un cargo se prestó a la ignominia a la que se prestó) supuestamente para luchar y abortar el proceso separatista y el referéndum ilegal, y se reunía con los que estaban organizando todo el cotarro, en una escena que si no fuera por lo trágica que es para España sería más cómica que el famoso camarote de los Hermanos Marx.
Es verdad que en España los tontos son mayoría, y no una mayoría cualquiera sino mayoría absoluta, pero a todos todavía no nos han lavado el cerebro, y aquellas reuniones eran como si para luchar contra los atentados islamitas el Secretario de Estado de Seguridad y un Coronel se reunieran con el Jefe del comando Yihadista, (porque eso era Puigdemont, el Jefe de los golpistas) y sus secuaces, con sus barbas, con sus turbantes, con sus cinturones llenos de explosivos y de cargadores para el kalasnikov, a prestarse a la farsa de hablar a ver cómo anulaban los atentados yihadistas. Y esto con el jefazo y los secuaces de los mismos.
Si esto no es el Camarote de los Hermanos Marx pero corregido y aumentado, que venga Dios y lo vea.
Y como Jefe de la Comandancia de Madrid de la que fue cesado luego por no tener los pantalones lo suficientemente bajados, tolerando los abusos de sus subordinados en el Valle de los Caídos y mil cosas más. Ahora venimos aquí y lo blanqueamos. Cuando en España lo que precisamos no es blanquear a los militares que van a lo suyo y se acuerdan de España únicamente cuando les conviene particularmente a ellos, sino lo que hay que hacer es todo lo contrario es señalarlos con el dedo diciéndoles que la serpiente que ahora les ha picado a ellos donde más les duele, que no es España sino su bolsillo y sus ínsulas, ellos la han amamantado a sus pechos, así que ahora que no vengan llorando.
El General de la GC de la IV Zona Andalucía, que le faltó tiempo para actuar contra el Brigada de Cádiz tachado de «franquista», pero que al mismo tiempo pareció tener reuma y parálisis en las manos para haber actuado con mayor motivo y fundamento jurídico contra las 7 faltas disciplinarias (2 de ellas muy graves, y 4 Graves) del Guardia de Podemos, (como así exige, aunque el General no lo cumpliera, el mandato del art. 103, 1º CE de sometimiento a PLENO, no parcial o a la carta, a la Ley y al Derecho), fue nombrado DAO (Director Adjunto Operativo) nada más llegar Pedro Sánchez al poder en agosto de 2018, y cuando ocurrió este cese del Coronel Pérez de los Cobos en 2020, este General para engañar a los tontos, que en España insisto son mayoría absoluta, hizo el paripé de dimitir, y allá que los borregos le aplaudieron como un gran patriota sin caer en la cuenta que dimitía 2 días antes de salir publicado en el BOD su pase a la reserva forzoso por edad (menuda heroicidad levantar las cartas cuando te quedan 2 días para irte de General a vivir del cuento) , y además no fue por una falsa solidaridad con su subordinado (lo que le importarán a los Generales rojos o advenedizos, que lo mismo les da «arre» que «so», sus subordinados), el Coronel Pérez de los Cobos, sino que varios Tenientes Generales, a la par que éste, saltaron porque el candidato a ocupar el puesto de DAO era un General de Brigada, y los Tenientes Generales de la GC se sintieron ofendidos que pudiera ponérseles por delante un subordinado suyo. Lo que había pasado en Barcelona con el golpe separatista, lo que estaba pasando en España todos los días de la destrucción de España a todos los niveles incluido el del orden público que España cada día se parece más a los suburbios de ciudad de México, y con la defensa nacional que ya es «derrota nacional» ante los asaltos de Marruecos, todo lo que está pasando en España, no es motivo para saltar, pero que le toquen su bolsillo y su «honra» de Tenientes Generales, hasta ahí podíamos llegar.
El Patriotismo no es eso, y llamar patriotismo a esto es ofender la memoria de los verdaderos héroes como Daoíz y Velarde o los defensores del Santuario de la Cabeza, y demostrar lo bajo que se está de «doctrina» para confundir el oro de 24 kilates con el llamado «oro de Toledo».
Yo al menos no voy a caer en la trampa, y yo no voy a aplaudir a los que han amamantado a la serpiente y se han prestado a obedecerles sin importarles cuáles serían las consecuencias para España, como el Almirante Memo o el General Coll, y se acuerdan de la «Justicia», únicamente cuando les afecta a ellos en su cuestión particular, que es lo único que les interesa de la Justicia, cuando les conviene, luego antes y después otra vez ni mirarla.
¿Qué va a ser lo siguiente?, que le hagan alguna jugada jurídica al Comandante General de Ceuta ese (Alejandro Escámez) que felicita el Ramadán todos los años a los enemigos de España, o al General Santiago el de minimizar las redes sociales, o al Ministro Bono, y se nos olvide su historial y los presentemos como héroes, cuando no lo son.
Lo peor que se puede hacer con una medalla o con un título honorífico es devaluarlo otorgándolo a quien no se lo merece. La Cruz de Hierro o la Laureada de San Fernando tiene valor porque no se le da a cualquiera, hay que realizar un acto extraordinario más allá del valor, si se diera a cualquiera, como ocurre con la medalla jurídica de San Raimundo de Peñafort, que otorga más categoría a quien no la tiene que a quien la tiene, como el Generalato, el mero hecho de que no te dejen ascender a General ya es más distinción para el que no asciende que para el que asciende, porque indica que eres mejor militar que el que asciende, con escasísimas excepciones, porque sólo ascienden los vendidos, porque los enemigos de España para el cargo cogen a los más tontos, para que la Defensa Nacional esté en manos de los más mentecatos, como forma de vencernos sin pegar un tiro.
Luego otra cosa, eso de la carta de la Unión de Oficiales está muy bien… pero está muy mal, porque en el Ejército y en la Guardia civil, no debería de haber «sindicatos» encubiertos, ni sindicatos podemitas como la AUGC, pero tampoco sindicatos de clase o de «cuerpo» como todos los demás. A las Fuerzas Armadas les hace falta mucha doctrina y mucho espíritu militar del que han perdido. Una cosa es que de momento no podamos cambiar las cosas y otra que no sepamos distinguir lo que está bien de lo que está mal. Recordemos al comandante Borrás, herido de muerte en el desembarco de Alhucemas, cuando se percató del semblante de sus subordinados cuando al ser herido fueron a socorrerle, y dijo que nadie se asustara que lo peor que le podía pasar es que se muriera y precisamente él había venido allí a morir por España, y pidió que sacaran de sus cosas una bandera de España para que lo enterraran con ella.
Hace un par de días (el 15 de septiembre) se publicó en estas páginas de El Español Digital el artículo «De canallas e idiotas» donde los lectores comentaban lo negro que estaba el horizonte para España. Es verdad que está negro no, lo siguiente, pero peor aún se va a poner si empezamos a aplaudir a quienes no se lo merecen. Vienen momentos duros para la Patria, porque en 1975 los que tenían que haber defendido a España y al Pueblo desertaron y sucumbieron ante las melodías de mentiras de los flautistas de Hamelin de entonces y 40 años después España está como un toro de lidia agonizando en la arena junto a las tablas, antes de recibir el estoque, y hemos vuelto a febrero de 1936. Ya veremos los que sobrevivamos si es que sobrevivimos algunos de los que estamos aquí para cuando llegue abril de 1939. Pero por Dios Santo, no volvamos a caer en el mismo error de hacer la Guerra de la Independencia contra los franceses de 1808 con todas sus penalidades para luego poner en el trono a Fernando VII. No cometamos el error de hacer la guerra de 1936 para luego entregar la Patria a los herederos de Stalin en aquella guerra. No llamemos «patriotas» a los villanos ni justos a los envilecidos. El Estado que salga de la salvación de España, si es que España se salva y sale algún Estado salvador, ha de ser Justo y Justiciero, y que depure responsabilidades del Poder Judicial, del Poder ejecutivo y del Poder Legislativo y demás colaboracionistas en la destrucción de España, y no caer en el cuento del traje invisible del emperador de decir lo bien que le está el traje al emperador cuando en realidad el emperador va desnudo y no hay traje. Yo al menos me niego a decir lo bonito que es el traje, aunque lo hagan todos los demás, cuando lo que estoy viendo es que el emperador va en gayumbos.
Si no distinguimos entre el bien y el mal, si regalamos las Cruces de Hierro por cualquier tontería, lo único que conseguiremos es que las Cruces de Hierro dejen de tener ningún valor y que una vez más la sangre y el sacrificio de los que murieron históricamente y mueran en el futuro por la salvación de España, no haya servido una vez más para nada.
No pretendo sentar cátedra, pero es mi punto de vista, lo peor que podemos hacer es actuar como el PP o como esa gente que aplaude al Rey cuando lo que tenían que hacer es silbarle por inepto y por no comprometerse con el Servicio a España.»
La del seguidor:
«La entonces concejala presidenta del distrito de Latina del Ayuntamiento de Madrid, Esther Gómez Morante, del partido Ahora Madrid, y actualmente concejala del partido Más Madrid, en virtud de competencias ilícitas prohibió la procesión del Corpus de Mayo de 2016, de la parroquia castrense de Sª Mª de la Dehesa de Madrid, el domingo 29 de mayo de 2016.
El entonces Director del Gabinete de Coordinación y Estudios, Coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos Orihuel, en escrito de REF NOR/, SALIDA Nº 3982 de 14 de JUL 2017, manifiesta que “las reuniones con finalidad religiosa en lugares de tránsito público deben quedar sujetas al régimen general de comunicación de los artículos 8 a 11 de la Ley Orgánica 9/1983, de 15 de julio, reguladora del Derecho de Reunión”.
El entonces Subdelegado del Gobierno en la Comunidad de Madrid, Luis Martínez-Sicluna Sepúlveda, en escrito de fecha 2 de noviembre de 2017, reitera cuanto figura en el escrito anterior, añadiendo que confirma que la Delegación del Gobierno en Madrid “tramitará las solicitudes” de procesiones religiosas, en lugar de “tramitará los actos religiosos en la vía pública”, “conforme a la citada Ley Orgánica 9/1983, de 15 de julio, reguladora del Derecho de Reunión”.
Hasta la fecha, en toda la geografía española y ante la inhibición y tolerancia de las autoridades del Ministerio del Interior y los delegados y subdelegados del Gobierno, se vienen tramitando los actos religiosos en la vía pública mediante la solicitud de autorización de sus organizadores a los respectivos ayuntamientos, en flagrante vulneración de la mencionada Ley Orgánica 9/1983, de 15 de julio, reguladora del Derecho de Reunión, a pesar de reiterados requerimientos a los firmantes de los anteriores escritos de acatamiento de la misma.
Por tanto, además de intentar engañar, mienten el entonces Jefe del Gabinete de Coordinación y Estudios de la Secretaría de Estado de Seguridad, Coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos Orihuel, y el entonces Subdelegado del Gobierno en la Comunidad de Madrid, Luis Martínez-Sicluna Sepúlveda que, de forma alevosa y premeditada, manifiesta que la Delegación del Gobierno en Madrid “tramitará las solicitudes” de procesiones religiosas, en lugar de “tramitará los actos religiosos en la vía pública”, conforme a la citada Ley Orgánica 9/1983, de 15 de julio, reguladora del Derecho de Reunión, desde la seguridad de que, en notoria connivencia con el Jefe del Gabinete de Coordinación y Estudios de la Secretaría de Estado de Seguridad, Coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos Orihuel, no recibiría en lo sucesivo ninguna “solicitud de tramitación” de procesiones religiosas, a pesar de habérsele solicitado reiteradamente que comunicase a las entidades concernidas en el caso que, en lo sucesivo, deben tramitar los actos religiosos en la vía pública según lo establecido en la citada Ley Orgánica 9/1983.
Consiguientemente, las autoridades del Ministerio del Interior en general han incumplido las funciones que les asignan los artículos 62.2.b), 73.3 y 75.b) de la Ley 40/2015, de Régimen Jurídico del Sector Público, y el Coronel Pérez de los Cobos en particular ha incumplido las funciones que le asigna el artículo 66.1.d) de la misma norma, con la agravante de reiteración.»
Mis reflexiones:
- Totalmente de acuerdo con ambos, por eso las transcribo y saco de su relativo anonimato.
- No sólo eso, sino que la actuación de Pérez de los Cobos como enviado especial el 1-O en Cataluña fue patética y cobarde, porque como decía Mota «Si hay que ir, se va, pero ir para nada es tontería»; y es que de los Cobos aceptó tamaña autoridad y responsabilidad para luego llegar allí a bajarse los pantalones o… no tenía que haber aceptado el cargo sin antes avisar de que si iba a Barcelona no era para nada porque… sería tontería. Viene a cuento un hecho histórico que resumo: hace alguna década, con motivo de muy graves disturbios en Turquía, el Gobierno llamó al jefe del Ejército comunicándole que, debido a que la policía estaba completamente desbordada, quería que interviniera el Ejército. El jefe del mismo le dijo que sin problemas, pero que el Presidente debía garantizarle que asumía plenamente la responsabilidad de su intervención y sus consecuencias. El Gobierno dijo que no, temiéndose lo peor. Pasados unos días, y ante la gravedad de la situación, volvieron a llamar al jefe del Ejército, comunicándole que se asumía las consecuencias de su intervención. Salió el Ejército a la calle, la revuelta duro unas pocas horas más. El resultado fue de cerca de un centenar de muertos y tres veces más de heridos, algunos graves y… punto.
- Pero aunque Pérez de los Cobos es uno más de los mandos superiores colaboracionistas –y no tan superiores– de la Malamérita, así como lo son los de las FAS, y su currículum es también nefastamente evidente, parte del cual recuerdan perfectamente las dos aportaciones antes transcritas, no quita, y ese era el objetivo del artículo que creo quedó claro, no el de ensalzar a de los Cobos, para que lo que se está llevando a cabo con él no deje de ser una prueba más, y bien clara, del talante sectario, dictatorial y totalitario de Marlaska y del PSOE… de ahora y de siempre, cuya historia criminal no tiene parangón, así como prueba de que el famoso Estado de Derecho no existe; otra cosa es que, claro está, no existe por los colaboracionistas como de los Cobos.
- En cuanto a la nota del «sindicato» picoleto, se transcribió por lo mismo, no porque dicha asociación/sindicato sea loable, que no lo es, sino porque ahora, sí, claro, ahora, pone el dedo en la llaga… que es de todos.
- Así pues, como ocurre casi siempre, una cosa no quita la otra, y hay que aprovechar hasta la menor, para mostrar y demostrar, cuanto más mejor, las pruebas de cómo estamos.
- Por último, gracias a las dos aportaciones que seguro que a los seguidores de esta web les habrán servido de mucho y que por su interés para ellos, que son los importantes, como dije al principio, me complazco en destacar.

Dos comentarios de gran valor para que conozcamos las posturas de estos caraduras.
Muchas gracias por sacar a la luz la VERDAD !!!!
Íñigo Caballero
Efectivamente son casi todos unos vendidos
Interesante aclaración e interesantes comentarios. No es ese guardia, desde luego, lo que importa para el caso, porque él mismo ya se ocupó de echarse estiércol encima con su lamentable actuación, circense, en Cataluña y su patética, la propia de un desgraciado, declaración ante la sala II del TS cuando el juicio a los golpistas; que fue, esta última, para haberle tirado con un puño de pesetas de las de antes y darle en toda la calvorota. No, él es el sujeto pasivo de un delito propio de un gangster, de un vulgar raquetero, de la variedad culera en este caso, que es el que cometió el jotito, como dicen en Méjico, mierdistro de marras, en colleras con la pava esa, con ese jumento que apreció a la toma de posesión ataviada de camilla con faldas recogidas por cordón de cortina que quería ser cíngulo, que dirige al no ascendido, que eso es lo que jode de verdad al coronelín.
Está actuando toda la caterva de actuales gerifaltes que mantenemos a cuerpo de rey, rey incluido, no ya como vividores sinvergüenzas, que también, sino como vulgares forajidos que no dejan ley sin violar ni afrenta contra España por perpetrar. Cosa que, encima y para más escarnio, hacen con alardes de triunfo, desde luego, en Madrid, y lo mismo en el Congreso que en la Moncloa o cualquier sede ministerial, pero igualmente lo hacen, con sus parlamentitos, palacios presidenciales y estaditos de juguete, a precio de oro y a costa de Juan Pandero como es natural, en el país Catalufo y en el País Asco; en Galicia, con ese asqueroso que rebuzna en castrapo; o en su predio balear la marranita local, que prohíbe el español y entiende el servicio de protección de menores como servicio scort ¡y no passa ná!; así como la auténtica piara de gorrinos apestados que, en el otro antiguo reino de la siempre española Valencia, sobre imponer igualmente el catalufo y prohibir el español, se dedican a no dejar atrás tropelía y desafuero, cuanto más insultante mejor, siempre que lo sea contra España. Y qué decir de Andalucía, donde a un bobo medio tarado que proclamaba el islam lo llaman padre de la patria andaluza, ahí es nada, o una zopenca licenciada llama «nuestros niños» a vulgares delincuentes extranjeros a los que según ella hay que mantener a escote, y su querido o lo que sea er quichi que le quita la placa a la casa donde nació José María Pemán «po facista» como decía aquel garabato que alguno de sus asesinos dejó sobre el cadáver de aquel falangista asesinado al sol y en plena calle del barrio de Triana; o ese dúo de la bencina, a cuál más cretino y más necio, que llevan la vara en Castilla y esa majadería de (-León), empeñados en contra de la opinión del pueblo en revolver los huesos de la fosa a que iban los niños nacidos muertos en esa localidad leonesa, porque quieren cribar los restos en nombre de esa «memoria histórica» proclamada por el Imbécil, que el cobarde de Marrano no derogó y que ahora este cretino cara dura de vicepresidente «el jeta» exige tan despótico como campanudo que ¡hay que cumplir! En fin, para qué seguir.
Sí «Kevlar Steiner», agonizando contra las tablas y sin huevos ni para tirar un triste derrote que alcance al puntillero, esa es la lamentable estampa que da hoy al mundo la nación española. Lista para entregar la cuchara y hasta el cucharón, a manos de un macarra, que tras alardear ¡en la misma sede de la ONU! de haber perpetrado la repugnante «hazaña» de profanar una sepultura, ahora, como el puntillero empalagoso y chulo barato que es, ya se relame ante la perspectiva de ver a la Patria rota y en el arroyo mientras sus amos, que le felicitarán, se parten la caja. Porque, nadie lo dude, van a resonar en el universo todo las carcajadas de los que nunca nos han tenido otra cosa que miedo y envidia, que nos tratarán desde ese momento y con razón de tan estúpidos como cobardes, y entre los que empezando por nuestros vecinos no suscitaremos más que risa, asco y, en los menos, lástima que no se qué será peor.
El patético Pérez de los Cobos, al lado del Teniente Coronel Tejero, parece un puñetero comercial del jodido Círculo de lectores.
Ese MAMARRACHO, ni tiene pelotas, ni, por supuesto, el más mínimo sentido del honor.
Por no tener, no tiene ni sentido del ridículo.
Ése, no vale ni para lustrarles los zapatos a Tejero… o al General Rodríguez Galindo.
Éstos últimos, SÍ que son OFICIALES -con todas las letras- de la Guardia Civil.
Pérez de los Cobos, es tan sólo el enésimo CÁNIDO LACAYUNO de los politicastros MASÓNICOS que han DESTROZADO España en menos de cincuenta años. Es de la misma raza que ese puto pistolo amariconado de Baños -el del canal Cuatro(*)-.
Ni más ni menos, ni menos ni más.
¡A mamarla, todos, TRAIDORES indecentes!.
(*)Al que NO veréis nunca en dicho canal -ni en ningún otro- es al General de Infantería de Marina Chicharro, es decir, al actual Presidente Ejecutivo de la Fundación Nacional Francisco Franco (FNFF).
Ése, es de otra raza bien distinta a la de los anteriormente citados Pérez y Baños. Es un PITBULL; mientras que los otros dos son sendos PERRILLOS LAMECOÑOS, dos ridículos caniches CASTRADOS.
Quien no sepa de quién hablo, que pinche aquí (foto): https://www.que.es/archivos/201002/2931406w-365xXx80.jpg