Constantino II, Gyanendra y Felipe VI. No hay dos sin tres.

El reciente fallecimiento del último rey de Grecia, Constantino II, me obliga a reflexionar sobre el presente y futuro de tres monarquías, dos europeas y una asiática.
Constantino II fue depuesto tras un referéndum nacional sobre la forma de gobierno del país, monarquía o república, celebrado el 8 de diciembre de 1974.
Un referéndum con el rey en el exilio desde 1967, es decir, desde hacía ya siete años, y en el que no le dejaron volver a Grecia para defender su causa, de una forma justa y equitativa, permitiéndole únicamente un discurso televisado a la nación.
En otras palabras, los gobernantes helenos, jugaron con las cartas marcadas…
Grecia se convirtió en un cortijo de los socialistas, depredadores y ladrones, como los “socialistos” españoles.
El caso de Nepal es parecido, a grandes rasgos, pues el rey tuvo que cohabitar con los fieros comunistas asiáticos, tan fieros como los nuestros, y que, al igual que Luis XIV, piensan que todo para el pueblo, pero sin el pueblo, constituyéndose en la nueva monarquía y nobleza del país.
El rey Gyanendra fue obligado a renunciar a ejercer el gobierno el 21 de abril de 2006, y el siguiente 15 de enero de 2007 tuvo que ceder la jefatura del estado al primer ministro, comunista, el equivalente a “nuestro” Pedro Sánchez.
En el ínterin, supongo que las pasó putas, y tuvo que cohabitar con toda esa gentuza, que poco a poco, iban mermando su poder y autoridad.
La forma de echar al rey fue por una decisión del Parlamento de Nepal, teóricos representantes, pero sólo teóricos, de la “soberanía popular”, es decir, del partido comunista.
No hay dos sin tres.
¿Y Felipe VI, cuando será echado del Trono y de la Jefatura del Estado español…?
Solo es cuestión de tiempo.
De poco tiempo.
Me inclino a pensar que la fórmula a utilizar será el referéndum, para que los españoles –la soberanía popular, según dicen-, se pronuncie sobre la forma de gobierno, la monarquía o la república.
Esa consulta se realizará pronto, tal vez en las postrimerías del año en curso, o a principios de 2024, si Castillo Sánchez, con la ayuda de INDRA, gana las elecciones generales…
¿Y quién apoyará a Felipe VI?
Creo que nadie, y siento decirlo.
Tiene un perfil tan plano, tan tibio, tan educado, que más parece pasotismo que otra cosa.
Desde luego, con mi voto que no cuente.
Un rey que no reina, que es incapaz de ejercer poder moderador y arbitral alguno, tal y como le permite la Constitución, en su artículo 56, no creo que suscite grandes simpatías entre el populacho.
Yo me levanto monárquico, por aquello de la estabilidad institucional, evitando la figura de un presidente de la república claramente partidista…, pero me acuesto republicano, visto su no hacer.
Quien calla otorga, y tanto silencio nos hace suponer a muchos españoles que ha perdido el habla, pues después del 3 de octubre de 2017, primera y única vez en que dijo lo que todos los españoles de buena voluntad esperábamos de él, no ha vuelto a levantar la voz.
En fin, con su pan se lo coma.
Castillos más grandes han caído.

Juan Carlos I le enseñó el camino a su hijo, cuando, en lugar de plantar cara a quien hiciera falta, y defenderse, salió huyendo de España…
Lo demás, es pan comido.
Y, creánme si lo digo que no lo sentiré.
En absoluto.
Ellos se lo han buscado.
Pienso lo mismo que ustedes. El problema es que lo que está en juego es la supervivencia de España, y a este monigote miserable y traidor, como toda su maldita estirpe, le importa un bledo.
Por supuesto que caerá este payaso más pronto que tarde, con la connivencia de una sociedad, sobre todo la más joven, absolutamente desconocedora del trasfondo político oculto tras ello, ni de cualquier aspecto relacionado con la Política en general, ni del menor interés en nada que lo merezca.
La extrema izquierda (única izquierda existente en España desde siempre como bien dice Kevlar), -la escoria socialista en particular, junto a la basura comunista bolivariana en los últimos años-, pero también el resto de la chusma política (derechita cobarde o falsa derecha incluida, por supuesto) han abonado muy bien el terreno durante cuatro décadas para que esto suceda, y poder revertir la situación a estas alturas se antoja poco menos que imposible.
El PP tiene tanta culpa de lo que está sucediendo…como el PSOE.
¡Solo hay que ver las deposiciones de Feijóo, Rajoy 2, un día sí, y otro también!
Dios quiera que se equivoque en sus dictamen de futuro, don Ramiro, pero pienso que no anda nada descaminado.
En absoluto.
Su majestad Felipe VI recibió en audiencia hace unos años a una muy importante comitiva de la masonería española en Zarzuela y se desconocen los motivos de dicha audiencia y lo que trascendió de ella, pero desde luego, su majestad no tuvo el coraje y las agallas que tuvo su bisabuelo el rey Alfonso XIII de mandar a hacer «puñetas» a otra comitiva de la masonería española en 1925 que le prometían seguir reinando si se unía a la masonería y declaraba a España un estado laico y aconfesional. Su majestad Felipe VI «el preparao» sigue los dictados de la agenda 2030 y está vendido a ella.