El cardenal Osoro a favor de la mentira
La Verdad nos hará libres; incluso la verdad con minúsculas; también cualquier verdad por pequeña que sea. Ergo la mentira, la falsedad, nos hace esclavos.
Bien, pues parece que el Arzobispado de Madrid-Alcalá, ese a cuyo frente está el ínclito y patético cardenal Osoro, no se entera o no se quiere enterar.
Una pequeña prueba, pero, ojo, muy significativa, la tenemos en la recomendación cinematográfica que hace la web de la Delegación Episcopal de Fundaciones –la misma cuyo director ha dimitido hace muy poco por andar vendiendo inmuebles de manera más que opaca–: nada más y nada menos que recomienda ver la falsa hasta el hartazgo última película del declarado sodomita Amenábar «Mientras dure la guerra», de la cual hay listas en Internet, de fuentes nada sospechosas, de todas las falsedades y manipulaciones que vierte en ella tan penoso director de cine; lista que sigue creciendo.

Fuera de la Iglesia no hay salvación, se ha proclamado durante siglos. Es decir, vivir y permanecer (hasta el fin de nuestra andadura terrenal) en el seno de la Iglesia Católica, era camino seguro hacia el Cielo.
Sin embargo, la nueva Iglesia instaurada por el sodomita Montini y su conciliábulo, parece haber devenido en una «modernísima» autopista hacia el Infierno. Cortesía diabólica de sus cada día más pésimos pastores.