El Gral. Fulgencio Coll: cinismo e incoherencia… como poco

Hace unos días publiqué un artículo sobre el Gral. Fulgencio Coll (AQUÍ) en réplica a unas penosas declaraciones suyas en las que exculpaba sin más a los militares (a todos) del desastre afgano, echando la culpa en exclusiva sobre «los políticos y sus asesores»; también afirmaba que los militares están para obedecer y punto; o sea, cual robots. El artículo, por los comentarios que he visto, ha levantado mucha polémica, sobre todo desde el instante en que saltó al ruedo un espontáneo, el Col. Amancio Alonso Álvarez; hombre de afirmaciones categóricas sin sustento argumental ninguno, lo que dice todo de él.
Pues bien, para incidir más en mi primer artículo y para justificar el título de este, nada mejor que recorrer, brevemente, el currículum, desde que ascendió a General en 2001, de ese «gran militar» que ha sido Coll según el citado Coronel.
Lo primero decir que desde hace décadas, quien asciende a General ya lo ha dicho todo, o mejor decir que ya lo ha callado todo. Porque nadie llega al generalato si no es previo haber demostrado que está dispuesto a bajarse los pantalones, y ahora también las bragas, hasta los tobillos, ya que de otra forma no se asciende pues para eso los ascensos son a dedo, por designación. Pero no al dedo de antes, que también lo eran, no. Antes, el dedo, la designación, era negativa, es decir, llegaban a General todos menos aquel que tenía alguna mancha, alguna metedura de pata significativa. La antigüedad era un grado. Se entendía que en tiempo de paz nadie demostraba ser ni más ni menos que otro. Luego… vinieron los de Estado (estorbo) Mayor y fueron cerrando el cupo de forma que sólo los del EM ascendían (Pedrosa fue la excepción que confirmó aquella regla) y… el dedo, la designación, se hizo «positiva», ¿por méritos?, qué méritos, tampoco, sino que ascendía quien quería el… político de turno. Lo dicho se aceptó porque ya para entonces el compañerismo verdadero en las FAS hacia tiempo que había muerto a manos de las «calificaciones», los «méritos», las licenciaturas civiles, etcétera, todo lo cual lo que en realidad había hecho era excitar las ambiciones y pasiones personales, o sea, matar el compañerismo.
Con Aznar (en 2001), Coll llegó a General de Brigada pasando meteórica y fugazmente, porque apenas se sentaba en el sillón de mando, durante los siguientes tres años a ejercer de: a) jefe del EM del Mando Pirenaico, b) jefe de la Brigada de Infantería Mecanizada Extremadura XI (al tiempo que comandante militar de Badajoz), c) a Bosnia-Herzegovina hasta finales de 2003 y d) en 2004 a Irak, previo ascenso a Gral. de División; como se ve todo un record de llegar, ver y largarse. Y es que no cabe duda de que Coll sintonizaba especialmente con el PP y con ese Aznar que… hizo tanta ciscadas como tonterías decía… y sigue diciendo.
Y entonces, de la noche a la mañana, tras el 11M, nunca del todo aclarado, accedió al poder Rodríguez Zapatero, de quien todo lo malo que se diga es poco… ¿o no?
Coll, que estaba al mando de los nuestros en Irak, y según él a regañadientes, pero sin decir esta boca es mía, se comió la vergonzosa retirada española exprés de Irak; dicho sea de paso «misión en el exterior» en la que, como en otras tantas, nunca debimos participar porque ni nos iba ni nos venía, máxime sin cobertura de la ONU, o sea, en contra no ya de la Constitución como todas, sino además en este caso de cualquier otra normativa propia o internacional. ¿Fue el 11M consecuencia directa de aquella ciscada de Aznar?

Pasados tan sólo dos años escasos, el despreciable marxista-leninista de Zapatero, decide castrar a la FAS creando la UME y… no tuvo a otro mejor que a Coll para que lo hiciera; le avalaba la sumisión demostrada en Irak. Cualquiera con un mínimo de dignidad personal y profesional (militar en este caso) hubiera dicho que, primero, eso de la UME (mejor habría sido simplemente Unidad de Emergencias) era cosa de Protección Civil y, segundo, jamás en la FAS; pero claro, la oportunidad la pintaban bastos y la ambición e interés personal de Coll ha estado siempre por encima de… la dignidad propia y de las FAS.
El trampolín de la UME le valió a Coll ser designado al muy poco nada más y nada menos que JEME en un equipo encabezado por Carmen Chacón, como ministro de Defensa, separatista desorejada, marxista-leninista, feminista radical, producto de la antiEspaña más rancia, y… el Gral. Julio Rodríguez (a) «El rojo» como JEMAD, cuya trayectoria en las FAS era de sobra conocida desde siempre, un comunistazo repugnante y por ello también producto de la misma antiEspaña.

Y ahora la pregunta del millón: ¿cómo es posible que Coll tuviera las tragaderas para compartir cama con semejantes personajes, Zapatero incluido? Pues porque Fulgencio Coll es un cínico, y como tal un incoherente. Nada le importó nunca nada excepción hecha de su carrera. Modelo de los militares desde hace décadas. Lo que corrobora en sus comentarios el Col. Amancio Alonos, aunque é lo llama en referencia a Coll que «siempre ha estado dedicado a su profesión»; o sea, lo que hemos dicho y vamos demostrando
Coll nunca tuvo problema alguno con Zapatero cuyas hazañas vamos a recordar: la infame Ley de Memoria Histórica –con la cual Julio «El rojo» disfrutó arrasando reliquias históricas de primer orden en los cuarteles con la complicidad de Coll–; intento de demolición del Valle de los Caídos, con piqueta incluida, el cual llegó a cerrar; aumento de nuestra implicación en Afganistán (como lo leen) para compensar la cagada de lo de la bandera yanqui y la espantá de Irak; la demoledora Educación para la Ciudadanía; legalización del «matrimonio» sodomítico; rendición final ante ETA que clamó al cielo y cuyas consecuencias vemos hoy todos los días en las noticias en forma de libertades, homenajes y prebendas a los etarras; los juzgados de Violencia contra la Mujer (¿y contra los hombres?); una extensa «regularización» de inmigrantes ilegales y la «reforma» de varios estatutos de autonomía especialmente el de Cataluña que también hoy sufrimos, además de la ruina económica de tres cuartos de España incluido un aumento del paro exponencial. Es decir, un maremoto antinacional y desastroso que dejó a España que no la conocía ya no sólo su madre, sino ni siquiera su abuela.

Y a todo lo anterior, Coll, ese «gran militar» según el Col. Amancio Alonso Álvarez, de Teniente General y de JEME; ahí es nada. O sea, en primera línea, siendo activo brazo ejecutor, con su silencio y con sus actos, obedeciendo sumisamente órdenes que quien tuviera un mínimo de dignidad personal y de patriotismo no obedecería jamás. Luego Coll era y es un cínico y un incoherente monumental… y eso como poco.
Tan cínico, que cuando se retiró se metió en VOX (¿?) y tuvo la desfachatez en Diciembre de 2019 de solicitar públicamente a «los poderes del Estado» (¿?) que impidieran una posible investidura de Pedro Sánchez si este llegara a alcanzar algún tipo de acuerdo con Esquerra Republicana de Catalunya. La leche, que pájaro este Coll porque ¿y quién fue y qué hizo Zapatero con el que tan bien se llevó? Casi peor que su gemelo Sánchez. ¿Qué se creía o le interesaba creer a Coll que era o hacía Zapatero estando él de JEME? ¡¡Increíble!! Ver para creer.
Pero claro, como hemos dicho al principio, no se llega a General desde hace décadas si no se baja uno los pantalones, y desde hace poco las bragas, hasta los tobillos, y se está dispuesto a tragar y tragar, como hemos visto hacer a Coll, conforme a lo que según él, y los demás Generales de estas décadas debe ser: «El militar sólo se plantea cumplir la orden…» y ello porque para el militar de ahora sólo cuenta «hacer la carrera»; en la Casa de Campo madrileña pita también sólo lo mismo. ¿Y este es el «gran militar», Col. Amancio Alonso Álvarez? Por él, y los que son como él, que son todos desde hace décadas, y por usted, Coronel, estamos como estamos.
PD.- Y en el caso de Coll también el afán de protagonismo, una de sus debilidades, no resignándose a quedarse en casita, queriendo emular a sus antepasados, tres de los cuales fueron alcaldes de Palma de Mallorca.

Julio el rojo, ex-JEMAD, ¡comunista!.
Miguel Ángel Villarroya, ex-JEMAD, ¡cesado! por inyectarse uno de esos VENENOS TRANSGÉNICOS cargados de ÓXIDO DE GRAFENO y de CÉLULAS MADRES extraídas de CADÁVERES de BEBÉS ASESINADOS en el vientre de sus madres, antes de que le tocase.
¡Menudos JEMADs…!. ¡Menuda cúpula militar…!. ¡Qué «nivel», Maribel!.
Aprended lo que son OFICIALES de verdad, RATAS de cloaca TRAIDORAS y COBARDES asquerosas. Aprended lo que son hombres de HONOR:
Hace unos días, 27 pilotos estadounidenses de dos alas de su Ejército del Aire (USAF) -15 de cazabombardero F-22 Raptor; y 12, de bombardero-, RENUNCIARON a su plaza en las Fuerzas Armadas de su país tras ser presionados por sus mandos para permitir que les inyectasen una de esas «vacunas» MORTALES del puto acojonavirus.
En el primer caso, es decir, en el de los pilotos de caza, sus superiores les mandaron un mensaje de texto ¡a las 04:00 de la madrugada! para que ¡antes de las 10:00! se «vacunasen».
Bien, pues esa misma mañana, el jefe de su Unidad, tenía encima de su escritorio la renuncia por escrito de dichos 15 militares. ¡Con dos cojones!.
Si no me creeis, aquí, podéis leerlo -en Inglés- vosotros mismos:
https://bestnewshere.com/27-u-s-air-force-pilots-resign-over-covid-19-vaccination-mandate/
¿Os imaginais a un oficial español haciendo algo similar…?.
Yo, tampoco.
Para eso, primero, se ha de tener HONRA. Y después, COJONES. Que es algo de lo que CARECEN absolutamente TODOS los EUNUCOS que conforman la actual cúpula militar (anti)española.
Lo que sí vi yo muchas veces, cuando estaba en activo, fue a coroneles, tenientes coroneles y demás INÚTILES con estrellas de ocho puntas en sus uniformes, brindar «por el rey» -léase por ese grotesco y degenerado TÍTERE de la puta MASONERÍA llamado Juan Carlos l-.
Si existen tres instituciones (anti)españolas que no pueden caer más bajo ya, ésas, son la Conferencia (anti)Episcopal (anti)española, la Guarra Civil -que, en su perfil de Twitter, cuando llega el día del «orgullo» (sic) homosexual, pone uno de esos trapos multicolores que gustan blandir los culeros y las tortilleras- y, por supuesto, las MISERABLES Fuerzas (des)Armadas (anti)españolas; cuyos capitostes, son CULPABLES por OMISIÓN de la DESTRUCCIÓN de España en menos de cincuenta años.
¡Que Dios se lo demande!.
Pd.: de esos CHONIS de mierda llamados policías, ni me molesto en hablar. Los cuerpos de policía (anti)españoles, siempre fueron refugio de DESERTORES del ARADO y YONQUIS del PODER con pocos estudios.
Aquí se está acorralando a los cadetes de todas las academias con la amenaza de perder curso y otras lindezas.
Con un par de sogas al cuello y mucho compañerismo
Si te refieres a que vuestros superiores os están amenazando para que permitáis que os inyecten uno de esos malditos VENENOS TRANSGÉNICOS, la decisión sólo puede ser una: mandarles a tomar por el puto culo.
Piensa que no sólo está en riesgo vuestra vida, sino también vuestra ALMA.
Quien, a sabiendas de que dichas «vacunas» llevan CÉLULAS MADRE extraídas de CADÁVERES de BEBÉS ASESINADOS, aún así, permita que le inyecten una de ellas, cometerá PECADO MORTAL, pues Dios lo considerará CANIBALISMO.
Te voy a dar un consejo: aguantad hasta que os den un ultimátum. Si llega el momento de que es o «vacuna», o calle, no dejéis ni terminar la frase al CABRÓN que la diga: haced la maleta y volved a vuestra casa SANOS y en estado de GRACIA.
Vuestra VALENTÍA será RECOMPENSADA pronto por vuestro Creador, pues, a partir del momento que hagáis eso, pasaréis a formar parte de lo que nuestro Señor llama su Remanente, su Resto fiel, su Ejército en la Tierra.
Dejad que esos TRAIDORES a Dios y, por supuesto, a España que os están CHANTEJEANDO se CONDENEN.
Llegará el día en el que nuestro Señor les pasará cuentas por lo que actualmente os están haciendo. Hablo, por supuesto, del Juicio Final.
Ellos, a lo suyo. Vosotros, a lo vuestro. ¡NO os sometáis al DEMONIACO sistema bajo ningún concepto!.
Se puede servir a Dios y a España de MUCHAS formas. No sólo en las Fuerzas Armadas.
Te lo dice un veterano. Hay vida fuera de las FAS.
Cada vez que os veo en televisión -con el «bozal» siempre puesto; pese a estar al aire libre-, pienso lo mismo: «son pobres ESCLAVOS. Menos mal que ya no estoy en activo…».
Con gente así, de esa calaña ¿cómo puede España y sus ciudadanos de bien, ir bien?