El Honor de la Guardia Civil
“El honor ha de ser la principal divisa del Guardia Civil; debe por consiguiente conservarlo sin mancha. Una vez perdido no se recobra jamás”. (Duque de Ahumada, Cartilla del Guardia Civil, 1845).
El ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza, de todo un General de División de la Guardia Civil, mientras el cabecilla de la trama, según fuentes policiales, un diputado del PSOE, al que obligaron a dimitir, deprisa y corriendo, evidencian que se está utilizando a la Benemérita como cabeza de turno de una presunta red de corrupción.
Conozco el Cuerpo desde mi infancia, adolescencia y juventud, pues la familia paterna poseía una casa de campo, “El Castesillo”, en la localidad natal, Laguarres, en el Altoaragón, donde paraban las patrullas de guardias civiles –números, se decía entonces-, desde el Cuartel de Benabarre, a 15 kilómetros de distancia.
Distancia que recorrían a pie, con unas capas largas, que teóricamente les protegían de las inclemencias, y a pie.
Allí podían descansar, beber agua, e informarse sobre cualquier asunto delictivo que se hubiera cometido en la comarca, presuntos maleantes que andarán por la comarca, etc.
Y normalmente se les daba algo de comida, pues eran muchas las horas que transitaban a la intemperie, con frio o calor, en fin, soportando estoicamente las inclemencias del tiempo, y la dureza de los caminos.
Llevaban unos viejos máuser, que pesaban una barbaridad, y muchas veces les sorprendía la lluvia, nieve, etc., en su camino, y acababan empapados y tiritando.
Nunca oí quejarse a ninguno, y aceptaban la dureza de su trabajo, por la necesidad de mantener la ley y el orden en las zonas rurales de España.
Posteriormente, como funcionario público, juez y fiscal sustituto, tuve ocasión de tratar con oficiales, suboficiales, cabos y agentes –a Dios gracias, se abandonó el impersonal “números”-, y en todos ellos, sin excepciones, pude conocer de primera mano el espíritu de sacrificio, la dureza de su trabajo, la falta de medios materiales, la existencia de Cuarteles que producían vergüenza ajena, por ver la indignidad en que tenían que vivir los Guardias Civiles, etc.
Con la modernización del Cuerpo, la informatización de su trabajo, la incorporación de un parque móvil, y la “manía” de hacer grandes cuarteles o comandancias, como si la guardia civil fuera el Ejército, cuando, a pesar de su carácter militar, la Benemérita se creó para mantener la ley y el orden en las zonas rurales, no en las capitales de provincia, y grandes ciudades…
En la provincia de Teruel, por ejemplo, conocí atracos que no pudieron prevenirse, ni detener a los culpables, pues el cuartel más cercano estaba a ¡70 kilómetros!, con unas carreteras de montaña, torcidas y retorcidas, en las que recorrer esa distancia, podía costar, perfectamente, una hora.
En cambio, en la capital había y hay una gigantesca Comandancia, con varios cientos de agentes, piscina climatizada, etc., pues a Luís Roldán le gustaba hacer grandes cuarteles, para generar así mayores comisiones o mordidas. (Otra explicación plausible, no encuentro).
Por cierto, Roldán, que se llevó hasta el dinero de la Caja de Huérfanos del Cuerpo, también era de la PSOE, y conviene no olvidarlo.
Ahora se pretende tapar la trama de “Tito Berni”, el diputado del PSOE, poniendo las tintas sobre el general, y supuestos amaños en obras de reforma en algunas comandancias y cuarteles.
Que no digo que no pueda ser cierto, ni pongo la mano en el fuego por nadie, a título individual, pero sí por la Guardia Civil, en su conjunto.
En un colectivo de más de 80.000 personas, es posible que pueda haber algún garbanzo negro, es más, estoy seguro de que así será.
La naturaleza humana es débil, las putas muchas, y la adicción a la cocaína, difícil de curar.
Pero eso sólo es la anécdota, no la categoría.
Y estoy seguro de que el Cuerpo, por la cuenta que le trae, será el primer interesado en depurar, penal y disciplinariamente, las responsabilidades a que haya lugar, pues le va su Honor en ello.
Como dice la Cartilla: “Una vez perdido no se recobra jamás”.
Termino ya, no sin antes manifestar mi desprecio hacia el todavía ministro del interior, y la todavía directora general de la guardia civil, que no sólo no están defendiendo el Honor de la Benemérita, sino que actúan como punta de lanza o ariete contra el Cuerpo.
Ellos, y el gobierno social comunista en su conjunto, nunca podrán recobrar su honor, por la sencilla razón de que no lo tienen.

Dejando al margen la evidente, grosera y miserable manipulación de este desgobierno infame y criminal y de sus furcias mediáticas, tratando de desviar la atención y el foco sobre la auténtica realidad de la corrupción generalizada de esa mafia inmunda llamada psoe, no hay que dejar de denunciar la actitud vil y despreciable de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado en general, no sólo durante la plandemia, ejecutando órdenes que sabían anticonstitucionales, avasallando y humillando diariamente a miles de ciudadanos indefensos, sino durante todo la legislatura de este desgobierno infecto, dejándose someter a todo tipo de descalificaciones y vejaciones por parte del inmundo ministro del Interior, principalmente, pero también de otros miembros de esta caterva de canallas, sin ir más lejos, del propio psicópata narcisista.
El tiempo pondrá a cada uno en su sitio. La vergüenza, la dignidad, el orgullo, el honor, el patriotismo, la nobleza, la grandeza, o se tienen o no, se nace o no con ellos, no se pueden comprar. Que cada palo aguante su vela. Allá cada uno con su conciencia.
¡Arriba España!
De acuerdo con todo tu comentario y enhorabuena, Gaspar.
Espana por Cristo
Se ve, querido amigo Ramiro tus buenos sentimientos y a buen seguro, agradecimiento hacia la Guardia Civil.
Eres un hombre de HONOR, pero, ya personas como tu, no existen.
Creo que, los tiempos han cambiado y con excepciones de Guardias Civiles de HONOR y sus nombres los tenemos todos presentes y empezando por Tejero, la corrupcion rampante que existe en nuestra PATRIA, ha hecho mella en todos los estamentos y la Guardia Civil no es la excepcion.
TODO, absolutamente esta CORRUPTO, Gobierno, Tribunal Constitucional y el 99 % de los Tribunales Ordinarios… la Policia, el Ejército, los funcionarios, los diputados, los senadores, todos, absolutamente TODOS.
Y la prueba del algodón es el Expediente Royuela con 1.300 asesinados en España por el PSOE y sus esbirros sin que ni la Guardia Civil ni la Policía, ni la Justicia muevan un dedo o se atrevan a mover un dedo…
Y recordar por si alguien no lo sabe que el brazo derecho de Mena es, precisamente, un sargento de la benemérita… Guardia Civil…
La mano criminal del ex-fiscal Mena, de Jiménez Villarejo, Margarita Robles, el ex-ministro Campo (actual Juez del Tribunal Constitucional…) y otra serie de asesinos…siguen actuando, extorsionando, asesinando, traficando con droga…
Por qué la GC y/o la Policía no hacen nada… amenazas de muerte, corrupción… o miedo… pero estos asesinos siguen libres y cumpliendo su agenda criminal.
Y el Expediente Royuela NO es un cuento chino. NO es un invento «complotista» sino algo auténtico y real.
El día que vea que un Juez inicia la Instrucción del caso Royuela, volveré a España.
España por Cristo
Gracias amigo, muchas gracias.
Un cordial y afectuoso saludo.
¡Viva siempre España!
Gracias a ti Ramiro por todo lo que haces por Dios y por España
No te llegamos ni a las suelas de tus zapatos..
España por Cristo
Don Ramiro, tiene usted razón en lo que podríamos llamar «la visión histórica» de la Guardia Civil, pero por desgracia, la Benemérita actual, no se parece en nada al Cuerpo de hace unas pocas décadas…
Hoy en día, están totalmente sindicalizados, y los Ágentes o Números, solo piensan en cobrar las horas extras, en conseguir los destinos menos onerosos, etc.
¿Y los Generales, Jefes y Oficiales…?
Pues la mayoría de ellos, salvo excepciones, en tener la carrera militar más brillante, aunque para eso tengan que lamer los zapatos a cualquier político de mierda -o política-, que se cruce en su camino.
Una buena parte de ellos piensan, como Zapatero en su tesina de licenciatura, que seguramente plagiaría de aquí y de allí, que el concepto de Nación es un concepto discutyido y discutible…
Evidentemente, con estas alforjas, no vamos a ninguna parte.
El 90%, por lo menos, de los miembros del Cuerpo, de todas las categorías, ya no se sienten Guardias Civiles, pñor lo menos con el espíritu primigenio de su fundador, el Duque de Ahumada.
Se sienten «funcionarios de uniforme».
La sindicalización y la feminización de la Benemérita van a ser, están siendo ya, su ruina, pues los Agentes:
* Quieren cobrar las horas extras,
* Buscar los destinos más cómodos, preferiblemente con horario de oficina.
* Conciliar la vida familiar con el trabajo, por supuesto con preferencia de la vida familiar al espíritu de sacrificio, el TODO POR LA PATRIA que campea en la entrada de sus cuarteles, y que pronto suprimirán, etc.
Y claro, así no se va a ninguna parte.
No tienen VOCACIÓN DE SERVIR A ESPAÑA, sino de servir a sus propios -y legítimos- intereses.
Pero nada más.
La están corrompiendo, y desde hace tiempo. Es un reflejo de la sociedad, pero por lo que ha sido, guarda aún los viejos valores. Sucede como en la sociedad española, de poso cristiano, que, a pesar de la paganización galopante guarda en la conciencia colectiva el poso de lo que fue, seguramente por el recuerdo de los que se fueron no hace tanto.
La palabra HONOR, por desgracia, la usan mentecatos con actitud lúdica que no han recibido instrucción para despertar su verdadero significado, el espíritu que reside en la memoria de sangre. El santo grial no es un objeto o copa o la razón que le quiera dar el mentecato para consolarse en su ignorancia. El hombre recto ha despertado su HONOR, por eso manifiesta el santo grial en todos sus actos, en cambio, el hombre curvado, durmiendo en el gregarismo o monismo, es la causa que arrastra al colapso social que hoy se manifiesta en España y en el resto del mundo. Por lo tanto, sin hombres de HONOR en el mando, los tres poderes que sustentan el estado de derecho, serán subyugados por las corporaciones privadas globalizas. El caos que han programado para destruir este sistema y anunciado en Davos como reseteo de la humanidad, nada bueno trae para los que sobrevivan en la imposición del transhumanismo.
Saludos cordiales
Saludos cordiales
De esos 80.000 quizás 500 bien pertrechados y de incógnito y sin previo aviso limpiarían el archipiélago isla por isla del mierdamen a todos los niveles que hay disfrazado de zona turistica,quizás.
La Guardia Civil ha sido, y en su mayor parte sigue siendo, una de las mejores policías del mundo, como para sentirse orgulloso. Pero, «Que buen vasallo si hubiera buen señor». En todos los ordenes, se está adulterando e infiltrando la corrupción, y poco puede hacer un guardia civil si el mal viene de arriba. Ahí tienen trabajo duro, para ir dando la vuelta al espíritu de la GC, les costará bastante más que en otras instituciones. La purga obligará a poner a muchos entre la espada y la pared, y cuando todo el bien, la democracia y el orden descansa en un solo individuo, es muy vulnerable y se sentirá muy solo. No quisiera verme en ese dilema, que es el mismo que tienen muchos jueces, maestros, ¡médicos!, etc cuando les obligan a la arbitrariedad y la injusticia. Si el sistema está corrupto no hay nada que hacer. A ver que órdenes hay que cumplir… es algo que todo funcionario debería irse planteándose hasta donde está dispuesto a llegar, porque nos gobierna el mal, y no es de dchas ni de izdas, esos son sus lacayos. El mal hoy viene envuelto en papel de regalo.
¿No cree usted que la Benemérita tiene dos grandes enemigos, en mi modesta opinión?:
* LA SINDICALIZACIÓN DEL CUERPO, con numerosos sindicatos, a cual más de izquierdas, constantes reivindicaciones, que lo están haciendo más parecido a la Policía Nacional, o a los Guardias de Asalto, en la segunda república, que otra cosa, pretendiendo así acabar con su condición de cuerpo policial, de naturaleza militar…?
* LA FEMINIZACIÓN DE LA GUARDIA CIVIL, con la entrada de gran cantidad de señoritas jóvenes, que excitan, y nunca mejor dicho, los líos entre mandos y subalternas, entre compañeros y compañeras, etc., y que, además, de la mano de la inepta y femihistérica directora general actual, pretenden la «conciliación de la vida familiar» y el deber,r por supuesto poniendo en primer lugar a la familia, los hijos, etc., que los deberes del cargo…?
Me gustaria mucho conocer su opinión al respecto, si a bien lo tiene.
Gracias anticipadas.
“Los tres hombres rubicundos que juegan a las cartas, con el sombrero echado sobre la nuca, son los guardias. No son malos individuos, tienen mujer, hijos y pequeñas dificultades como todo el mundo, pero detendrán a los acusados, dentro de un instante, con la mayor tranquilidad del mundo. Huelen a ajo, a cuero y a vino tinto y no tienen ninguna imaginación. Son los auxiliares, siempre inocentes y siempre satisfechos de sí mismos, de la justicia. Por el momento, hasta que un nuevo jefe de Tebas con el debido mandato les ordene detenerlo, son auxiliares de justicia de Creón”.
(“Jezabel – Antígona”, de Jean Anouilh, Editorial Losada SA, Buenos Aires, 1ª edición 2009, páginas página 127).
«Incluso la mejor espada si se deja sumergida en agua salada finalmente se oxidará».
Sun Tzu («El arte de la guerra»)
Este tema daría para un libro, y no pequeño, sino de más de 700 páginas.
En mi modesta opinión la Guardia civil como Cuerpo ha perdido el Honor, o peor aún, lo ha cambiado como en el siglo XVIII algunos jefes tribales de Oceanía cambiaban sus hijas a los marinos ingleses, por un espejo o por un collar de cuentas sin ningún valor. Es lo que tiene cuando vendes tu Alma al Diablo.
A la Guardia civil la hicieron grande Generales como D. Juan Atarés Peña, asesinado por la espalda por ETA la Nochebuena de 1985, para amargarle a la familia esa Nochebuena, y todas las demás en lo sucesivo. Y antes de él los Generales Sanjurjo, Eliseo Álvarez-Arenas, Enrique Cánovas Lacruz, Camilo Alonso Vega, y otros. Y la hicieron grande el día a día, porque el movimiento se demuestra andando, de los modestos Comandantes de puesto y Guardias civiles, sobre el terreno, por su compromiso resuelto y sincero las 24 horas del día, los 365 días del año, de entrega sin un paso atrás a lo que el uniforme representaba, y de lucha contra el bandolerismo y la criminalidad, con una vida sacrificada como sólo de sacrificada es la vida militar cuando se vive en plenitud de virtudes.
Y a la Guardia civil se la han cargado los políticos sin ninguna vocación de servicio, que han visto en la política no un «cursus honorum», sino una manera de enriquecerse ellos a costa de la Patria, y los Generales que han venido detrás de aquéllos, que han abdicado de las virtudes militares para abandonarse en los brazos de estos políticos a cambio de un espejo o un collar de cuentas sin ningún valor verdadero, (porque el dinero, cuando se tienen cubiertas tus necesidades vitales, no es excusa y carece ya de ningún valor, la codicia es inútil y la vida fatua de lujo y miseria moral a lo único que conduce es a la degradación como militar y a arder en el infierno), y han desertado del compromiso moral, pero también ideológico de lucha contra los enemigos de España y contra la criminalidad, es decir contra el Mal, que tuvieron sus antecesores desde el origen de la creación de este Cuerpo.
Si el compromiso contra la criminalidad no se hubiera abandonado no se habría producido esa identificación de muchos miembros y mandos de la Guardia civil con el PSOE y con las acciones del PSOE, y no me refiero solo a los Generales socialistas sino a los que actúan como tales, sin serlo, por puro interés. Quién le iba a decir a los Guardias civiles asesinados por ETA, que ETA sería aliada del Gobierno de España en la actualidad y la Guardia civil estaría entregada a este Gobierno «minimizando» en las redes sociales la crítica a este gobierno.
Y se la han cargado desde la base los guardias que ingresaron en la Guardia civil desde el hedonismo y el izquierdismo, sin ningún espíritu militar ellos y contaminando al resto, perdiendo de vista el sacrificio que el desempeño de esta profesión suponía, y han pretendido que la Guardia civil sea como trabajar en el Corte inglés o en «Recarchutados Martínez», y han reivindicado por encima de cualquier otra consideración la «jornada laboral», como si la guerra tuviera horario de oficina, y la conciliación con la vida familiar, donde llevar el niño a la guardería es más importante que el servicio, (lo que no quiere decir que no deba recompensarse debidamente la dedicación al servicio a España, cosa que desgraciadamente nunca se ha hecho adecuadamente, ni con la Gc ni con el resto del Ejército, tampoco en tiempos de Franco), prevaleciendo el aburguesamiento, y un montón de cosas más en parte por la deserción y el aburguesamiento también y el mal ejemplo de sus jefes, que pendientes de su propio interés material han abandonado a sus subordinados, porque todo este ambiente subversivo produce el mismo efecto que introducir una sola manzana podrida metida en un cesto, que al final contamina al resto. Pero cuando no es una sola manzana sino muchas, cada vez más, el efecto es exponencialmente mucho mayor. El resultado es lo que tenemos, Este es el nivel y el «estilo»:
https://www.youtube.com/shorts/wOjVBPeQYJg
https://www.youtube.com/watch?v=1MleUsSLGsw
Una vez, (hace unos pocos años) un General de la Guardia civil le reprochaba a un Alférez que había detectado por el Gps que llevan los vehículos, que unos guardias de servicio de 22 a 6 horas se habían ido a dormir una hora antes de terminar su servicio, comprometiendo a otras patrullas coordinadas con ésta con el mismo horario, que sin saberlo habían quedado sin el apoyo de éstos, (no pasó nada pero de haber pasado no se hubiera podido contar con ellos), y que el suceso luego hipócritamente manipulado, la extrema izquierda había querido presentarlo como «acoso» por parte de los mandos a estos guardias que en realidad habían cometido abandono de servicio y que acto seguido de saber que se había detectado su falta se habían dado de baja «psicológica»(?), y este revuelo mediático importunaba al General por si, tratándose de la todopoderosa AUGC, pudiera tener alguna consecuencia política para él, le reprochaba el General al Alférez que para qué había tenido que detectar esta falta, «si ves que no están, no vayas a comprobarlo, ¿para qué vas? , ¡no vayas!», le decía, dándole una lección de mal Jefe.
Naturalmente el ejemplo que esta actitud provoca en los subordinados es que hay que pasar un poco de todo, que el afán de mejor servicio cede ante el acomodo político, y que hay que mirar para otro lado cuando resulta lo políticamente correcto. (Sun Tzu, en su libro «El arte de la guerra», nos recuerda las cualidades del verdadero jefe: «El general abarca las virtudes de sabiduría, sinceridad, humanidad, coraje y el ser estricto.»).
De tanto «mirar para otro lado» estamos donde estamos en este momento, no ya en este tema sino en todos los demás (Ceuta, Melilla, la corrupción generalizada y todo lo demás).
Estos Generales de la Gc del PSOE o pro-PSOE son los que en lugar de ir puesto por puesto de su demarcación para inspeccionar los puestos, oír las necesidades de cada uno y verlas él con sus propios ojos, y diligenciar los libros, como está mandando, lo que hacen es que visitan la Comandancia de la provincia y allí hacen que los Comandantes de Puesto de la demarcación les lleven los libros para diligenciarlos o que han de firmar, sin pisar el General los puestos como sería lo procedente. Otro mensaje a los subordinados de dejación y de falta de ejemplaridad en el cumplimiento del servicio.
La pérdida de la Gc empezó cuando a los Guardias civiles los mataban como a perros durante la Transición y lo que se presentaba como loable no era ir a saco contra los terroristas, sus cómplices, y sus instigadores materiales e intelectuales, sino que era derogar la Ley antiterrorista de Franco que daba respuesta jurídica al fenómeno terrorista, que precisamente para poner fin a su eficacia y que no supusiera un temor para los crímenes que se avecinaban, a los 8 meses de muerto Franco ya estaba derogada la parte esencial de la misma. O decir, para engañar a los bobos que se lo creían, para así sufrir los atentados y no poner remedio y no hacer nada cada vez que se cometía un atentado terrorista, que «no había que caer en la provocación». Esta frase estaba a la orden del día para lavarle el cerebro a civiles y militares, como otras muchas frases de la propaganda roja disfrazada de «centrista», como aquella de Carmen Enríquez de «la tradicional amistad hispano-marroquí», con el Rey vendiendo España a Marruecos, que se repetía una y otra vez y que era y es también una patraña como una catedral.
Se usó y abusó de esta frase de que «no había que caer en la provocación» de una forma tan miserable y vomitiva que con ella se aprovechaba el quebranto emocional que para las esposas de los militares, policías, y guardias civiles recién asesinados suponía el shock de su marido muerto, para aprovechando este shock sacar a estas mujeres en la tele con el cadáver de su marido todavía caliente para que dijeran que perdonaban a los asesinos, que era lo acorde con lo de «no caer en la provocación». ¡Cómo manipularon a estas pobres mujeres!
«No hay que caer en la provocación» significaba que había que dejarse matar y no hacer nada, ni siquiera protestar las viudas.
Con esta frase mágica los americanos hubieran podido desembarcar en Normandía sin una baja, si hubieran inculcado en los alemanes que no cayeran en la provocación que suponía el desembarco.
Menos mal que D. Juan de Austria no pensó en Lepanto que no había que caer en la provocación de los turcos.
Menos mal que Franco, cuando acudió en socorro de Melilla, tras el desastre de Annual, y la ciudad estaba a horas de ser asaltada y su población pasada a cuchillo por los rifeños, no dijo a sus legionarios: «no tiréis a los moros, no caigáis en la provocación».
Menos mal que el General Moscardó, cuando fueron los rojos a asaltar el Alcázar de Toledo, no dijo: «no les disparéis, no caigamos en la provocación», o en Krasny Bor, la División Azul, ante el asalto del Ejército Rojo, no dijo: «no tiréis, no caigamos en la provocación».
Es decir, en realidad esta frase lo que encerraba era cómo vencer a España sin que opusiera resistencia, o como escribió Sun Tzu en «El arte de la guerra»: «Lo supremo en el arte de la guerra consiste en someter al enemigo sin darle batalla». Y eso fue lo que hicieron con España sus enemigos.
Todo lo cual da idea de lo burda que fue aquella propaganda roja manejada por el Gobierno títere de los intereses extranjeros, y sus medios de comunicación, y no pocos militares de salón como Gutiérrez Mellado o su biógrafo el versallesco Puel de la Villa y otros muchos, de «no caer en la provocación», algunos de sus defensores (de la frase) fueron asesinados pagando con su vida su propia estupidez, y lo imbécil que hay que ser como Policía y como Militar, que se supone que precisamente como militar tienes que tener un mínimo de formación en guerra psicológica y antisubversiva porque también el engaño es parte de la guerra (el libro «El arte de la guerra», escrito por Sun Tzu hace más de 2500 años, es decir que ha llovido lo bastante como para haberse enterado sobre todo si eres General y militar profesional que has estado 5 años en una Academia, ya dice que: «El arte de la guerra se basa en el engaño») para no tragarse las mentiras y el engaño del enemigo, como para que los Jefes militares de entonces y no pocos de sus otros cuadros de mandos se dejaran confundir y paralizar sin reaccionar por una mentira tan burda y tan poco elaborada que los dejó paralizados como institución, con honrosas excepciones a título individual.
Entre lo que los alemanes hicieron en Lidice por el atentado terrorista a Reinhard Heydrich, -Protector de Bohemia y Moravia-, en 1942, y no hacer nada hasta el extremo derogar de inmediato la Ley antiterrorista (que preveía la pena de muerte para los asesinos, que al derogarla se les garantizaba la vida y después la impunidad, porque todos estos a los que ahora se les homenajea y que van de taberna en taberna tomándose «chiquitos» como si tal cosa, si los hubieran colgado una vez se les hubiera sacado toda la información, conforme al trato que la Convención de Ginebra prevé para fuerzas irregulares, partisanos, sin uniforme ni pertenencia a un ejército regular, que actúan como terroristas como era el caso de ETA atacando ambulancias y objetivos civiles, y les hubieran aplicado la propia Convención de Ginebra, no tomarían ahora tantos «chiquitos» ni otros los habrían emulado sabiendo cuál era el final que les esperaba, curas etarras incluidos, que son otros que se han ido de rositas, porque nunca España fue menos «Estado de Derecho» que cuando gobiernan los rojos, que la Ley y la propia Constitución sólo tienen validez y se aplican cuando políticamente les interesa a ellos, generalmente como pretexto y en fraude de ley, y se excepcionan y se vulneran cada vez que les conviene hacerlo), de otorgar una amnistía total incluidos a los no juzgados todavía como fue el caso de los asesinos de Carrero Blanco, que no habiendo sido juzgados todavía cuando se acordó la Amnistía, no deberían haberse beneficiado de la amnistía y sin embargo se la aplicaron indebidamente y se beneficiaron, y de enterrar a los Guardias y militares asesinados a escondidas, con misas de madrugada y en euskera, para escarnio de sus esposas y de sus familiares. Entre el extremo de Lidice y el extremo de los funerales de madrugada, por la puerta de atrás y en euskera que organizaba despóticamente Gutiérrez Mellado, creo que hay un amplio abanico de posibilidades, como está demostrando además el Presidente de El Salvador Nayib Bukele.
A ello se prestaron militares repugnantes entre los repugnantes como Sáenz de Santamaría, que fue quizás el peor Director General del Cuerpo de entre los militares, (después ya fueron todos civiles), otros de buena fe en su ingenuidad y falta de capacitación en guerra irregular y antisubversiva, y otros que sin ser miserables de origen, se pasaron literalmente al enemigo que entonces como ahora representaba la clase política, -la peor desde Antonio Pérez, el Secretario traidor de Felipe II -, y a obedecer a esta clase política, puesta por intereses extranjeros CIA incluido como se ha publicado después, sin mirar cuáles eran las verdaderas intenciones de estos políticos, que eran cargarse a España, y las consecuencias que ello iba a tener para España y para los propios tres Ejércitos, que eran la anulación de sus ejércitos, como se ha escrito un libro («Ejércitos anulados», del General Piñar y el Coronel Manrique), y la indefensión de la Patria frente a los enemigos exteriores e interiores. Como fue el caso del General Quintana Lacaci o de Aramburu Topete, que después de haber servido ambos en la División Azul abrazaron a las nuevas autoridades que desmontaron España y ambos se murieron sin devolver, si tan rojos se habían vuelto y tanto asco le daban, la Cruz de Hierro que ganaron en Rusia o haberla cambiado por una estampita de la Pasionaria, o una foto con marco de plata del Secretario de Estado de Seguridad Francisco Laína.
A partir de ahí todo fue cuesta abajo y sin frenos a todos los niveles, también en la Guardia civil.
Con el pretexto de la «libertad» se desmantelaron los Cuarteles de la Guardia civil de los barrios, con el efecto de permitir con ello la proliferación de la delincuencia de barrio y del tráfico de drogas, que se generalizaría acto seguido.
Con ello se perdió no solo en información e inteligencia, porque los guardias de los puestos de barrio conocían los movimientos en el barrio y conocían a sus vecinos y sabían quién era una persona de orden, quiénes eran buena gente, quién un quinqui o quién una amenaza para un niño, sino el aspecto preventivo de la delincuencia, porque precisamente la presencia cercana de la Guardia civil impedía «ab initio» que se pudiera establecer en impunidad el tráfico de drogas o la compraventa de objetos robados, y disuadía que muchos jóvenes, sobre todo en los barrios humildes, arruinaran su vida metiéndose a delincuentes, porque el fuego hay que evitarlo o apagarlo en sus momentos iniciales, no cuando ya todo arde como una pira, que es lo que está pasando ahora en Cataluña con violaciones y asesinatos prácticamente todos los días.
Está por escribir el libro de «la generación perdida» de los chavales que, en la Transición tras la muerte de Franco, fueron arrojados en masa a la droga (recordemos al socialista alcalde de Madrid Enrique Tierno Galván incitando al consumo de marihuana a los jóvenes o la propia presencia del famosísimo narcotraficante Pablo Escobar en la fiesta del PSOE cuando Felipe Gonzáles ganó las elecciones de 1982: https://www.youtube.com/watch?v=O30v3moeOfQ
y fue ganar el PSOE las elecciones y llenarse España de drogadictos), y a ser carne de cárcel y de SIDA.
Está por escribir el drama de familias modestas con esta lacra a que fueron arrojados sus hijos en aquellos aciagos años donde la miseria moral imperaba por encima de cualquier otra consideración.
De la desaparición de los Puestos de la Guardia civil de barrio siguió la posterior y continua desaparición de los Puestos de la Gc en no pocos pueblos.
El reagrupamiento de efectivos es una medida que tiene su lógica en el ámbito estrictamente militar no en el policial o de lucha contra la delincuencia, cuando te enfrentas a un enemigo que te supera en medios y en número, como hizo Moscardó con los puestos Gc de la provincia de Toledo, que los concentró en el Alcázar porque un puesto con tres o cuatro guardias y un Cabo no podían hacer frente a una turba de varios cientos de milicianos anarquistas y comunistas con cartuchos de dinamita y fuertemente armados, o a un regimiento progubernamental con piezas de artillería mandado por Azaña o Largo Caballero, pero en tiempo de paz la existencia de puestos en todas las localidades, no sólo en las más importantes, sino también en las zonas más despobladas, era garantía de una adecuada red de inteligencia e información y de que la delincuencia encontraría un freno hasta en los puntos más recónditos, y una garantía para los ciudadanos pacíficos de esa España rural que lleva 40 años abandonada a su suerte.
Ahora los puestos han desaparecido de multitud de poblaciones, y donde todavía quedan, a las dos de la tarde colocan el cartel de «cerrado», como si un Puesto de la Guardia civil fuera una tienda de colonias o como si la delincuencia descansara o actuara sólo en horario de oficina. Todo esto parece, -otra explicación racional no tiene-, que se ha hecho con toda la intención, de restarle eficacia a la acción policial y de abrir la mano a la delincuencia, como cuando se legalizó la posesión y consumo de los porros, y todo esto tiene un efecto degradador claro en la población, o se ha despenalizado en la practica el que se puedan usurpar en impunidad casas ajenas, para la completa indefensión de sus legítimos moradores y propietarios, que es una forma de apoyar a los delincuentes en perjuicio de las personas pacíficas.
El militar de hoy no es el militar de 1943 ni tampoco el destacado en el Sahara en 1975, el cambio generacional ha supuesto que el estamento militar está ya infectado de 40 años de propaganda roja cayendo en régimen de monopolio y sin oposición como una lluvia ácida sobre corazones y mentes, y es una parte más del circulo ideológico del PSOE. De hecho el General de la Guardia civil encarcelado en Canarias en el Caso Tito Berni, en realidad estaba no en funciones de Guardia civil en activo sino del entramado de la red clientelar del PSOE, a parte de que a los Generales de la Guardia civil los nombra el Gobierno, sea del PSOE o del PP, con los criterios siempre del PSOE que rigen cuando Gobierna el PSOE directamente o cuando lo hacen a través de persona interpuesta como es el PP, que no existen diferencias entre ellos sino más bien todo lo contrario:
https://www.youtube.com/watch?v=1rH3O4ZMcFg
https://www.youtube.com/watch?v=Lq30ndqbqdQ
Para llegar a este punto ha habido y se ha producido una subversión o bolchevización de la Guardia civil por la cúpula y por sus bases. Por la cúpula, con Generales advenedizos (y otros mandos) como ese que salió en la tele confesando que se dedicaban a «minimizar las críticas al gobierno en redes sociales», o el Coronel que presidía la Junta de Evaluación de Brigadas que propuso excluir de un acenso por antigüedad a un Brigada porque tenía una denuncia por franquista del Diputado de Podemos, cuando la exclusión no estaba prevista como sanción y cuando no se había resuelto ni penal ni administrativamente la denuncia (que luego se resolvió la penal con la exculpación del Brigada hasta el punto que luego los denunciantes no se atrevieron ni a recurrir la sentencia, porque la acusación había sido un completo churro que ponía de manifiesto la nula profesionalidad de los miembros de la Guardia civil que se habían prestado a articularla y dar traslado al Juzgado, y la administrativa con el archivo al desinflarse y caer como un castillo de naipes después de la sentencia penal absolutoria, porque el expediente administrativo estaba cogido con alfileres sostente mientras cobro y a nivel de 2º de Primaria que es el nivel jurídico existente en la Guardia civil), o los Generales de la Gc que en la Dirección General aceptaron la propuesta de exclusión del Coronel que presidía la Junta de Evaluación de Brigadas, en lugar de sustituirlo por otro que por lo menos no mancillara la Constitución ignorando el significado de los principios de legalidad, tipicidad y de presunción de inocencia, porque claro todos los militares y Guardias civiles rojos mucho hablar y llenarse la boca con la Constitución pero luego no hay actuación que no suponga una patada a la Constitución).
Y una bolchevización por sus bases, con la labor de la AUGC (Asociación Unificada de Guardias Civiles) y otros sindicatos bajo la forma de asociaciones, que durante más de 15 años ha tenido de portavoz al actual Diputado de Podemos por Cádiz, lo que da idea de lo que significa esa asociación en el seno de la Guardia civil.
https://www.lasvocesdelpueblo.com/wp-content/uploads/2017/02/En-la-imagen-el-actual-diputado-de-Podemos-Juan-Antonio-Delgado-Ramos-anteriormente-de-profesi%C3%B3n-guardia-civil-ex-secretario-de-Comunicaci%C3%B3n-de-AUGC…-lasvocesdelpueblo.jpg
Ante la certeza de los mandos que la sintonía con el PSOE y con los mantras del PSOE y la extrema izquierda (valga otra vez la redundancia) es garantía de escalar posiciones en el escalafón, se ha producido en los mandos un fenómeno de imitar y tomar como propio el discurso de la extrema izquierda, (porque el PSOE es extrema izquierda) así por ejemplo el escudo de la Guardia civil con los colores del colectivo LGTBI adoptado de forma institucional desde la propia Dirección General (¡si Camilo Alonso Vega o Carlos Iniesta Cano levantarán la cabeza!), o el discurso en favor de la incorporación de la mujer a la Guardia civil hasta representar la mitad del Cuerpo como objetivo al que se aspira, cuando hasta el más tonto de la Zona euro sabe que la mujer en otras profesiones o cometidos puede ser muy buena, (incluso en funciones de información en el seno de la Guardia civil, para lo cual sólo se precisa un pequeño porcentaje) pero en cambio como patrullero de la Policía o Guardia civil es si no un 0 a la izquierda, sí un 2 ó un 3 como máximo, porque cuántas veces se produce una pelea cuerpo a cuerpo (ante la pérdida de autoridad de la GC, que esa es otra) entre una pareja de la Guardia civil y uno o varios delincuentes, y cuando un miembro de la pareja de la Guardia civil es mujer, ésta se queda mirando sin implicarse en el combate, mientras que el compañero guardia varón se tiene que enfrentar él solo al delincuente o a los delincuentes, y reducirlo por sus propios medios porque su compañera se queda mirando como si ella no fuera guardia.
Ante esta realidad, el pretender que la mitad de los efectivos de la Guardia civil sean mujeres significa ni más ni menos que dividir por dos su operatividad, y ante esta evidencia, -que hasta el más tonto de la Zona euro lo ve y lo reconoce-, que haya Generales y Jefes de Comandancia de la la Guardia civil, (y otros infectados por la propaganda) que haciéndole el juego a los políticos, digan como un logro o algo positivo cuando es una calamidad que qué buena idea que la mitad de la Guardia civil sean mujeres, como un Coronel Jefe de Comandancia que fue decirlo y congratularse porque el porcentaje de mujeres en la Guardia civil fuera el mayor posible, que lo nombraron enseguida para el Estado Mayor en Madrid.
Esta simbiosis cada vez más evidente entre la cúpula (y no tan cúpula) de la Guardia civil, y el discurso ideológico de PSOE/Podemos, cualquier persona con unos mínimos, al margen de su particular pensamiento político, tendría que saber que esta gente miente hasta cuando van al médico, pero hasta unos niveles de descaro que cuesta trabajo aceptar, y a las pruebas de este ejemplo me remito como muestra un botón:
https://www.youtube.com/shorts/QCHntJadaoY
de modo que si tú como policía o Guardia civil no eres consciente de esta realidad, como ocurrió en 2015 cuando un Brigada de la Guardia civil fue denunciado por franquista por el Diputado de Podemos por Cádiz y portavoz de la AUGC, y les faltó a todos y cada uno de los guardias civiles por los que pasó este asunto, desde los más modestos a los Generales de la Dirección General, de hacerles el juego al guardia y diputado podemita, es que como policía o Guardia civil no vales un duro, tanto si te dejas manipular por tonto que eres como si te dejas manipular porque es lo que miserablemente te conviene para progresar, porque esta gente actúan en fraude de ley incluso cuando dicen la verdad, que no fue el caso, porque el mismo Guardia Diputado de Podemos que denunciaba al Brigada acusándolo de odio contra la mujer por un supuesto tuit del Brigada que se preguntaba si no sería contrario a la igualdad entre hombres y mujeres el hecho de que las pruebas físicas de acceso a la Gc y a las FFAA no fueran las mismas para hombres que para mujeres, u otro que se preguntaba si no era sexista que solo hubiera un día de la mujer trabajadora. Esto se calificó por el guardia podemita denunciante como «odio contra la mujer», y a los mandos de la Guardia civil les faltó tiempo para aceptar esta absurda interpretación, abrirle un expediente disciplinario sin verdadero motivo y dar parte al Juzgado con menos motivo todavía, y unos meses después este mismo guardia de Podemos, ya como Diputado de Podemos, protagonizó en el Congreso una protesta saliendo con una pancarta por la libertad de Andrés Bódalo, el activista de extrema izquierda encarcelado por cometer diversas agresiones entre ellas a una mujer propietaria de una heladería en la localidad de Úbeda, que estando en avanzado estado de gestación (6 meses de embarazo) fue brutalmente amedrentada, amenazada y agredida por Andrés Bódalo y sus secuaces, por negarse a secundar una huelga y cerrar el establecimiento, a la que amenazaron con que cerrase o le quemaban el negocio con ella dentro, y a la que sacaron violentamente por la ventana de su establecimiento y la tiraron al suelo, mientras la insultaban con frases machistas como que se fuera a su casa a fregar los platos (puede comprobarse en el video de Televisión Española del enlace que se indica a continuación, por el testimonio de su marido que no pudo auxiliarla ante tan numeroso grupo de agresores armados con palos). Estos son los que hipócritamente se presentaban en la denuncia contra el Brigada como adalides de los derechos de la mujer. Tan malo es que los Generales y demás miembros de la Guardia civil cayeran en el montaje contra el Brigada a sabiendas de su injusticia que que cayeran por pura estupidez de dejarse manipular, porque tan malo es lo uno como lo otro, (aunque lo primero sea todavía peor), porque tú como jefe policial no te puedes dejar engañar por unos políticos cuyo líder ideológico (Lenin) proclamaba como lema de actuación : «contra los cuerpos: la violencia, contra las almas: la mentira».
El video de lo sucedido en la heladería puede verse en este enlace:
https://www.youtube.com/watch?v=ZkRT3rpB9fw
Aquel compromiso de lucha contra la delincuencia y criminalidad de la Guardia civil desde su orígenes, ya se ha perdido, se perdió cuando se abrazaron a UCD, PP y PSOE, se perdió cuando se dejaron desarmar en Reinosa, se perdió cuando dejaron abandonados los coches todoterreno de la Guardia civil, en Barcelona, con armas largas en el maletero y se dejó todo en manos de los separatistas catalanes que los destruyeron y se apropiaron de las armas (aunque luego las devolvieran en ese momento se las llevaron), en lugar defender los vehículos y a la comitiva judicial a fuego y bayoneta; se perdió cuando se prestaron a minimizar las críticas en redes sociales al Gobierno cuando este Gobierno es aliado de los herederos de ETA; se perdió cuando el responsable de la Guardia civil en el aeropuerto de Barajas, luego ascendido por Pedro Sánchez, permitió que las famosas 40 maletas de la dirigente venezolana Delcy Rodríguez entraran a España sin ningún control (no sabemos si con cocaína, con fajos de dólares, con la documentación sobre la presunta corrupción de la embajada de España en Venezuela, o con qué, porque como no se revisaron no se sabe); se perdió cuando la Guardia civil en comparecencia pública confesó que se dedicaban a minimizar las críticas la gobierno, se perdió cuando en lugar de ser garantía de los Derechos y libertades públicas de los ciudadanos se posicionaron con el Gobierno para imponer manu militari las restricciones a la libertad luego declaradas inconstitucionales, sin ninguna consecuencia para nadie; se perdió cuando en lugar de estar espiando a los enemigos de España a lo que se dedican muchos de ellos es a rastrear lo que se dice por internet para ver si pueden imputar un delito de odio con el que tener amordazada a la gente que se resiste a la corrupción y a la destrucción de España. Se perdió cuando tuvieron la actuación que tuvieron en el Valle de los Caídos cuando la profanación de la tumba de Franco, y la que han tenido año tras año contra la gente que iba allí. Luego sus nietos saldrán diciendo dentro de 70 años que sus abuelos no hicieron nada.
No se puede adorar a Dios y al dinero al mismo tiempo. Hay Guardias a título individual o pequeñas unidades de unos pocos que no han perdido el honor de ser Guardias civiles, pero el mando, buena parte de las bases, y la Guardia civil como Cuerpo, al ponerse en no pocas ocasiones al servicio del Gobierno-PSOE enemigo de España y de la propia Guardia civil, (porque sirven a un Gobierno que tiene como aliados a los herederos de ETA, y de aquellos mismos que asediaban el Santuario de la Virgen de la Cabeza, o que echaban al mar atados de dos en dos y lastrados con piedras y cadenas para que se hundieran en el mar de Cartagena a los Guardias civiles capturados en Albacete y en Levante los días 14 y 15 de agosto de 1936, desde el buque Río Sil, véase a este respecto los Cuadernos monográficos números 1 y 36 de la Revista «Cartagena Histórica», que se puede ver a través de estos dos enlaces, respectivamente: https://archivo.cartagena.es/gestion/documentos/20709.pdf
https://archivo.cartagena.es/gestion/documentos/19773.pdf
), y además hacerlo de un modo militante, la GC como Cuerpo ha perdido el Honor, y éste es irrecuperable, porque no es la pérdida cometida por unos pocos sino de muchísimos y por los más responsables, y otros muchos que desde puestos intermedios o inferiores comparten su misma «moral» y actitud. Ya pasó, aunque no a este nivel, en Guadalajara durante los primeros días de la guerra civil al unirse la Guardia civil a las partidas de milicianos anarquistas y comunistas en la represión miliciana contra los señalados como «derechistas» o «beatos», y también en la Barcelona de Companys y el atracador de bancos Juan García Oliver..
Es mi opinión, tampoco pretendo sentar cátedra, pero sí señalar por qué se ha llegado a esto, entre otras muchas posibles causas.
Amigo, su brillante y exhaustivo artículo, que ha dejado el mío a la altura del betun -hay que ser modestos-, merecería ser publicado como una colaboración más, pues es de gran interés.
Gracias, muchas gracias.
Pues sí, señor Steiner ha sentado catedra con este exacto comentario donde describe la corrupción generalizada en la Guardia Civil, en la política y en todos los estamentos de la sociedad española, anestesiada y drogada.
España desde el principio de la «llamada» Transición es un estado fallido porque su diseño previsto por los Estados Unidos y su mano criminal, la CIA (creadora de la ETA y directamente de la muerte de Carrero Blanco) desde el inicio tenía como objetivo nuestra destrucción como estado y como cuerpo social católico.
La colaboración inestimable del falso rey Juan Carlos, su hijo Felipe, masón como su padre y enemigo de nuestra PATRIA, ambos fieles servidores de la infame “corona británica”, del PSOE y sus esbirros González, Zapatero y este último, Sánchez y la no menor del corrupto del masónico y abortista PP con el «gran» José Mari Aznar (logia Hathor Pentalpha) o el prolífico Rajoy (solo tres logias… Walhalla, Parsifal y Pan Europa), y la colaboración inestimable de los nacionalistas también alineados con el Nuevo Orden Mundial.
Me quedo extasiado cuando compruebo que los regímenes de Cuba o China sin ir más lejos, NO les afecta ese virus sorprendente de la «democracia».
La pregunta procedente es, ¿por qué el virus «democrático» NO les contamina? La respuesta es evidente.
Gracias a STEINER por su análisis al que NO se le puede añadir ni un punto ni una coma. Gracias otra vez.
Y, de nuevo, agradecerle y no es redundancia sino sinceridad, esa frase que es una de las claves de nuestra sumisión: «no había que caer en la provocación»… no había pensado en su significado y trascendencia.
España por Cristo