La extraña «Ley para combatir el antisemitismo» norteamericana
El 14 de enero de 2019, el presidente Donald Trump promulgó la «Ley de lucha contra el antisemitismo europeo 2017.1», que establece, entre otros, que «es de interés nacional de los Estados Unidos combatir el antisemitismo dentro y fuera del país» (énfasis agregado), que «hay una necesidad urgente de garantizar la seguridad y protección de las comunidades judías europeas», y que «el Departamento de Estado debe continuar documentando a fondo los actos de antisemitismo e incitación antisemita que ocurren en todo el mundo». (énfasis añadido).
Conforme al texto de la misma, nos surgen algunas dudas que consideramos legítimas.-
Uno. ¿Por qué la protección de los judíos está en el interés nacional de los Estados Unidos y no de Israel?
Dos. ¿Por qué a Estados Unidos le preocupa el antisemitismo y no el resentimiento contra otras razas, naciones y credos?
Tres. ¿Reconoce Estados Unidos la soberanía de los países europeos o de la Unión Europea, según sea el caso? El acto no se limita a los Estados Unidos, como lo indica el nombre. ¿No se está arrogando los Estados Unidos el derecho a ser el único soberano en el mundo?
Cuatro. El hecho de que los judíos, que constituyen el 2-3 por ciento de la población estadounidense, haya aprobado esa ley que sirve a sus intereses colectivos, es obviamente indicativo de su influencia, ¿no es así? Para demostrar el punto, podríamos mencionar que el Congreso adoptó casi literalmente la definición de antisemitismo de la Alianza Internacional para el Recuerdo del Holocausto (AQUÍ DICHO TEXTO). Si realiza la observación presentada anteriormente, ¿es usted automáticamente culpable de albergar sentimientos antisemitas? La redacción de la Ley estipula que el resentimiento antisemita incluye «el mito […] de los judíos que controlan los medios de comunicación, la economía, el gobierno u otras instituciones sociales».
Cinco. El documento hace un gran esfuerzo para describir formas de antisemitismo y destaca el hecho de que ocurre en todo el mundo. ¿Se puede plantear una pregunta de por qué tenemos el fenómeno global persistente del antisemitismo, pero nunca hemos oído hablar de un fenómeno global persistente de resentimiento anti-chino, anti-francés, anti-alemán o anti-árabe? ¿Es esa pregunta sola también un acto de antisemitismo? Y finalmente,
Seis. ¿Por qué debería un pueblo, especialmente si este tiene su propio estado, insistir en vivir en otro país donde no es particularmente querido? ¿Por qué esta gente debería atreverse a enseñar a la nación anfitriona cómo comportarse?
Por último.- ¿Se registrará este texto como antisemita?
Sin duda este texto será registrado como antisemita.
Porque con una simple batería de preguntas cualquier persona, sin ser una inteligencia superior, llega a la conclusión de que, efectivamente, que los judíos controlan los medios de comunicación, la economía, el gobierno y las instituciones de EE.UU…..
y lo intentan en todas las naciones, no es un «MITO» sino una peligrosa realidad.
¿Será registrado también como «antisemita» este comentario?
Estimado sr.: exacto. Tal y como van las cosas, y tal y como han «definido» lo que dicen que es «antisemitismo», y tal y como se acepta, su comentario, este artículo y hasta un tebeo de Mortadelo y Filemón serán, a no tardar mucho, declarado antisemitas. Saludos cordiales