Innovaciones y novedades innecesarias… o peor aún
Tiempos difíciles. Tiempos de confusión. Tiempos recios. Tiempos de dolor. Ciegos que conducen a ciegos. Pastores que dispersan. Sal sosa. Sepulcros blanqueados. Hipócritas.
En cierta ocasión un periodista le preguntó al cardenal Ratzinger, (futuro Benedicto XVI) cual podría ser la causa del hundimiento de la Iglesia; sin dudarlo respondió: “todo dependerá de cómo tratemos la Liturgia”. En esta foto observamos el altar de la celebración de la misa en Fátima el 13-3-2017. Todo lo que vemos es simbología masónica. El altar no tiene forma de altar, sino de mesa, con un paño negro en el frontal que cubre todo y, sobre el altar se observa un mantel blanco. Los candelabros son negros con cirios blanco, (no están encendidos). Los celebrantes se sientan sobre cubos negros (no se observa en la foto) y son cinco, que es la base del pentagrama masónico y satánico. El Cristo, separado de la pared, pertenece a la simbología de la Nueva Era (New Age). Todo lo que he descrito, todo, sin excepción, pertenece a la liturgia masónica; no tiene nada que ver con la liturgia de la Iglesia.

La “Custodia” que levanta Francisco con la Hostia Consagrada, representa el astro Sol, que es la base de la simbología masónica, no católica.

Cuando ayer me enviaron esta foto y le vi a Francisco sujetando ese palo con un pincho clavado en la parte superior, pensé: ya no tengo dudas que la masonería eclesiástica domina por completo la iglesia católica. Es lo más aberrante que litúrgicamente he contemplado jamás. Tenía razón el futuro Benedicto XVI cuando dijo que, “el final de la Iglesia estaría condiciona a cómo tratemos la Liturgia”.
Observemos que el báculo de Francisco ESTA COPIADO DEL BÁCULO SATANICO DE LA BRUJERIA
