2 respuestas a «LA ENTREVISTA – Padre Olivera Ravasi, uno de los sacerdotes más influyentes en habla hispana»
Una gozada de entrevista. Se nota que, a este cura de sotana –de los auténticos-, la verdad lo conquistó. Tiene vocación de la verdad, tiene vocación de dar a conocer a DIOS.
La gente sensible, incluso carente de fe o de fe tambaleante, se da cuenta de cuando quien pretende explicarle, hablarle de fe, no siente realmente lo que dice; ese en lugar de sembrar, dispersa. Se muestra simplemente en el respeto, en los gestos habituales la fe o su carencia. Aquí, viene al caso el ejemplo que nos relató el Cristo, sobre los que, ya no solo aparentan, representan, discretamente para los demás, sino los que exageran la mentira (tanto clérigos como seglares), cuando, ante quien tienen que mostrar la Verdad, y en todo momento, es ante el Padre; que nos escucha y ve en lo escondido de nuestro propio pensamiento. No hagáis las cosas para ser vistas por los hombres: preceptos de hombres… la verdad relativa de cada cual.
Vivimos alejados del Padre, no lo tenemos presente apenas, y para colmo le nombramos en vano continuamente. El Hijo se escandalizaría de nosotros por lo olvidado que tenemos al Padre, cuando tendría que estar siempre en nuestra mente de la mano de Jesús, que nos enseño a hablarle, como él le hablaba en en la tribulación, en la soledad del transito a la muerte, mientras los discípulos dormían.
La cristiandad fue infiltrada por el Malo, y hubo que matizar. El catolicismo también ha sido infiltrado y habrá que matizar, por las obras les conoceréis.
Esta web utiliza cookies propias para su correcto funcionamiento. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos.
Más información
Una gozada de entrevista. Se nota que, a este cura de sotana –de los auténticos-, la verdad lo conquistó. Tiene vocación de la verdad, tiene vocación de dar a conocer a DIOS.
La gente sensible, incluso carente de fe o de fe tambaleante, se da cuenta de cuando quien pretende explicarle, hablarle de fe, no siente realmente lo que dice; ese en lugar de sembrar, dispersa. Se muestra simplemente en el respeto, en los gestos habituales la fe o su carencia. Aquí, viene al caso el ejemplo que nos relató el Cristo, sobre los que, ya no solo aparentan, representan, discretamente para los demás, sino los que exageran la mentira (tanto clérigos como seglares), cuando, ante quien tienen que mostrar la Verdad, y en todo momento, es ante el Padre; que nos escucha y ve en lo escondido de nuestro propio pensamiento. No hagáis las cosas para ser vistas por los hombres: preceptos de hombres… la verdad relativa de cada cual.
Vivimos alejados del Padre, no lo tenemos presente apenas, y para colmo le nombramos en vano continuamente. El Hijo se escandalizaría de nosotros por lo olvidado que tenemos al Padre, cuando tendría que estar siempre en nuestra mente de la mano de Jesús, que nos enseño a hablarle, como él le hablaba en en la tribulación, en la soledad del transito a la muerte, mientras los discípulos dormían.
La cristiandad fue infiltrada por el Malo, y hubo que matizar. El catolicismo también ha sido infiltrado y habrá que matizar, por las obras les conoceréis.