Mártir José Fernández de Henestrosa Boza (52)

José Fernández de Henestrosa Boza, (1898 – 1936) nació en Fuente Obejuna, hijo de José Fernández de Henestrosa (terrateniente y militar retirado, que fue Alcalde del pueblo y gestor de la fundación del Convento de las Hijas del Patrocinio de María) y María Josefa Boza y Lozano de la Vera. De familia económicamente pudiente, por lo tanto, desde pequeño le inculcaron una profunda religiosidad. Estudió en el Colegio de los Padres Jesuitas de Villafranca de los Barros (Badajoz).
Contrajo matrimonio con Magdalena Balmaseda Núñez en 1925, mujer de gran ejemplaridad. Tuvieron siete hijos, a los que educaron muy cristianamente. Ambos iban Misa todos los días y rezaban el Rosario a diario rodeados de sus hijos.
José Fernández de Henestrosa poseía en propiedad un modesto encinar y era arrendatario de otro. Nunca tuvo problemas con sus trabajadores del campo o de la casa, e incluso algunos le defendieron cuando fue detenido. Persona conocida por sus buenas costumbres, caridad y católico practicante, muy culto, preocupado por los más desfavorecidos tanto en lo económico como en poner paz entre ellos. Mantenía buenas y asiduas relaciones con los Padres Franciscanos del Convento de Fuente Obejuna (sus siete miembros murieron también mártires), situado frente a su domicilio. Pertenecía a la Orden Terciaria Franciscana.

El 13 de Julio de 1936 nació su séptimo hijo, Luis, e intentó bautizarlo en el citado Convento Franciscano, lo que no consiguió por prohibírselo la autoridad local. El 20 de Julio, en compañía de su cuñado y una vecina, se dirigió a la Parroquia del pueblo con la intención de bautizarlo allí, pero se lo impidió un grupo de milicianos frentepopulistas que se habían adueñado del templo. Poco después, esa misma tarde José fue detenido y encarcelado en la cárcel que se encontraba al lado del Ayuntamiento.
Compartió prisión con los sacerdotes y los Franciscanos del pueblo. Durante su encarcelamiento ayudó a mantener la fe y la moral entre todos detenidos mediante la oración, los Ejercicios Espirituales y las frecuentes exhortaciones, acostumbrando a rezar con los brazos en cruz y arrodillado en el suelo, tal y como hacía en su domicilio. Quienes pudieron visitarlo en la prisión dicen que José estaba sereno y tranquilo, y que preguntaba mucho por su hijo pequeño Luis. Dos meses duró su encarcelamiento, recibiendo en esos días un trato denigrante e inhumano.
El 21 de Septiembre fue conducido a Azuaga (Badajoz) en el mismo camión en que fueron llevados los siete Franciscanos y cuatro seglares más. Durante el trayecto, todos fueron brutalmente vejados y torturados intentando que blasfemaran, sin conseguirlo. Al llegar a Azuaga, los tuvieron encerrados en una celda de reducidas dimensiones durante dos días, sin darles ni comida ni bebida. José fue sacado en compañía de otro fraile joven para barrer y fregar el suelo de los calabozos y el corral.
En la madrugada del día 22 fueron llevados a las tapias del Cementerio de la localidad, donde murieron fusilados y dando vivas a Cristo Rey. Tenía 38 años.
NOTA.- Esta serie está dedicada a los mártires de la persecución anticatólica entre 1936 y 1939 del Frente Popular, coalición marxista-leninista revolucionaria formada por el PSOE, PCE, CNT, PNV y ERC.

¡¡Honor y Gloria!!, Héroes de España.
Católico y caballero español… con religiosos y militares en sus ancestros y vida. Esa es nuestra España, ó era… ¿quo vadis España?, esperemos que aún sin merecerlo Dios nos vuelva a ayudar y salve nuestro amado país, que tanto le quiso obedecer en otros tiempos. Pedimos la maravillosa intercesión de nuestra Madre la Santísima Virgen María. Daremos la batalla invocando a nuestros mártires y que Dios reparta suerte.