Mártires José Medes Ferrís y hermanos (104)

José Medes Ferris (Algemesí/Valencia 1885 – 1936). Hijo de padres profundamente católicos, ya de joven se distinguió por su ejemplar conducta moral y gran religiosidad. Asistía a Misa diariamente muy de madrugada antes de dedicarse a sus labores en el campo, pues era agricultor; nunca faltó al rezo del Rosario diariamente. Contrajo matrimonio con Purificación Esteve Martínez, no teniendo hijos. De ejemplar vida tanto pública como privada. Especialmente caritativo con los más necesitados en lo personal, también lo era en lo colectivo pues se implicó en numerosas obras sociales. Asimismo valiente en extremo en la defensa pública de Dios y la Iglesia. Miembro muy activo del Sindicato Católico Agrícola. Pertenecía a la Adoración Nocturna, y varias congregaciones de seglares tales como las del Sagrado Corazón de Jesús, V.O.T. (venerable orden tercera) del Carmen, Santo Domingo de Guzmán, Asociación del Santo Rosario y otras.
Natividad Medes Ferris (Algemesí 1880 – 1936). Profesó como monja cisterciense en 1916 en el monasterio de Zayda de Valencia, tras de lo cual se incorporó al monasterio Fons Salutis de dicha orden en Algemesí cuando se fundó.
Vicente Domingo Medes Ferris (Algemesí 1888 – 1936). Profesó como carmelita descalzo.
Ernesto Medes Ferris (Algemesí 1890 – 1936). Profesó como carmelita descalzo.
Al estallar la guerra, los tres hermanos de José Medes fueron expulsados de sus respectivos monasterios, pasando a refugiarse en su domicilio en el cual lograron subsistir sin llamar la atención, pues era éste y su esposa, Purificación, los que les mantenían, bien que todos colaboraban en las labores del campo; también dedicaban muchas horas a la oración.
Pero tras un tiempo, las envidias y resentimientos que albergaba una vendedora ambulante de prensa, que vivía cerca a la casa de José y que formaba parte de la célula comunista del comité del Frente Popular de Algemesí, los denunció, impulsando su detención.
Al atardecer del 11 de Noviembre de 1936, se presentaron en el domicilio un grupo de milicianos frentepopulistas exigiendo a la esposa de José, Purificación Esteve, que entregase a «la gente escondida» refiriéndose sólo a los religiosos, irrumpiendo por la casa, profiriendo graves amenazas y propinándole bofetadas y empellones. Aunque la mujer se resistió, el alboroto terminó por decidir a los tres hermanos a entregarse, saliendo de su escondite en el que se habían ocultado cuando se apercibieron de la llegada del grupo de invasores. José Mendes no estaba en ese momento en la casa.
Sor Natividad fue conducida al monasterio de Fons Salutis, en el propio Algemesí, donde tantos años había vivido como religiosa. Sus hermanos fueron encerrados en el convento de las Bernardas de la misma localidad convertido para entonces y desde el mismo 18 de Julio en cárcel y cheka.
De vuelta en su domicilio y al enterarse de lo ocurrido, José Mendes junto con su esposa comenzaron a orar intensamente dejándolo todo en manos de la Divina Providencia, como era su lema de vida desde siempre.
Al anochecer, los frentepopulistas regresaron al domicilio esta vez en busca de José Mendes al cual detuvieron llevándolo junto a sus dos hermanos, bien que manteniéndole incomunicado de ellos.
En el mismo día de su detención, Natividad Mendes fue sometida a una mascarada de juicio del cual salió condenada a muerte. Los dos hermanos religiosos lo mismo. No así José Mendes.
Sin más dilación, sobre las once de la noche, Natividad Mendes fue introducida en un coche en el que también introdujeron a su hermano Ernesto, mientras que Vicente fue subido a otro y José a un tercero, por lo que estos dos últimos viajaron solos con sus captores. Todos ellos llevaban las manos atadas a la espalda, sufriendo los insultos, empellones y culatazos de quienes les conducían a la muerte.
Los tres automóviles tomaron la carretera de Alcudia a Carlet, y en las cercanías de Alcudia, a 8 kilómetros de Algemesí, pararon, hicieron descender a los cuatro hermanos y se tomaron sus tiempo para maltratarlos. Finalmente, a primeras horas de la madrugada ya del 12 de Noviembre acabaron con ellos de sendos tiros en la nuca. Uno de los frentepopulistas presentes testimoniaría más tarde que el padre Ernesto, en el momento de su martirio y en nombre de sus hermanos, dijo a los asesinos: “Sabemos que nos vais a matar, pero moriremos con gusto por la religión y por España, ¡Viva Cristo Rey!”, grito este último que fue acompañado por el de sus hermanos. José Mendes tenía 51 años, Natividad 56, Vicente 48 y Ernesto 46.
NOTA.- Esta serie está dedicada a los mártires de la persecución anticatólica entre 1936 y 1939 del Frente Popular, coalición marxista-leninista revolucionaria formada por el PSOE, PCE, CNT, PNV y ERC.
