Mentiras y cobardías ucranianas
La manipulación propagandística ucraniana, y por ende occidental, vienen quedando en evidencia desde el primer día por su grosería, pero con el tiempo son cada vez más palpable.
Les ofrezco dos vídeos: en el primero, verán cómo gestiona la televisión ucraniana sus reportajes «a pie de bombardeo» y en la segunda podrán observar la prueba de cómo Ucrania emplea las ambulancias de la Cruz Roja para transportar tropas vulnerando uno de los principales acuerdos para caso de guerra; claro, así eluden a la aviación rusa o, mejor aún, se alguna resulta tocada podrán clamar al mundo cómo los rusos cometen crímenes de guerra. Sin más comentarios.

«La verdad está tan oscurecida en este tiempo, y la mentira tan establecida, que a menos que amemos la verdad no la conoceremos». Pascal (1623-1662). Pensamientos, 864.
En todos los tiempos, en todos, la verdad siempre ha tenido problemas y dificultades para ser conocida. «Yo soy la Verdad» dijo Nuestro Señor, y…¡y anda que no tuvo problemas!
El problema y la dificultad de conocer la verdad en este tiempo, en nuestro tiempo, es que tenemos que buscarla en medio del bombardeo de: libros, periódicos, radio, televisión y la gran bomba Internet.
Hace años contaba un abad de un monasterio de clausura que unos años antes del Concilio Vaticano II, un monje le preguntó «que si Sofía Loren era monja de las que estaban dentro -de clausura- o de las que estaban afuera».
(A mediados de los 80, escribí a unas monjas de clausura que conocía desde niño: ¡y me respondió la abadesa con una carta escrita con su ordenador!
Si la hubiese contestado desde mi ordenador la abadesa tendría que haber esperado hasta el 2010. Por cierto, me enteré por Internet que hace unos meses, las cinco monjas que quedaban se tuvieron que ir a otro convento de su Orden y el convento cedido a una cofradía).
No entiendo árabe (suponngo) pero se ve salir soldados de un vehículo con el emblema de la Cruz Roja…
Cuando todo esto termine…, espero que Zelenski y sus cuates no consigan eludir (como acostumbran los políticos) a la siempre contrahecha y mínima justicia humana.
Es la hegemonía del dólar, no pararan , no dudaran en hacer lo que sea.