Mons. Viganó directo contra el impresentable de Paglia: aborto NO

El presidente de la Pontificia Academia para la Vida, Monseñor Vincenzo Paglia, en el transcurso de una entrevista concedida al canal de televisión italiano RaiTre el 26 de agosto (AQUÍ), se refirió a la infame Ley 194 que legaliza el aborto como “un pilar de nuestra sociedad vida”, escandalizando a millones de católicos italianos fieles al Magisterio y que todavía recuerdan las palabras de fuego de Juan Pablo II contra ese horrible crimen , que sólo en Italia ha sacrificado a más de seis millones de niños inocentes en el altar del egoísmo y del anti liberalismo. -Ideología de Cristo.
La justa indignación del cuerpo eclesial ante las declaraciones del presidente de una Academia fundada por Juan Pablo II precisamente para oponerse al aborto va acompañada del aplauso de los defensores de la “salud reproductiva” y la “interrupción del embarazo”, que están siempre dispuestos a acusar a la Iglesia de injerencia cuando habla con la voz de Cristo, pero sin embargo ofrecen elogios tan pronto como sus peores exponentes se prostituyen al pensamiento alineado del mundo y adoptan los principios inhumanos del neo-maltusianismo como propios.
Como Pastor y Sucesor de los Apóstoles, no puedo dejar de condenar con la mayor fuerza las escandalosas palabras de Paglia, que contradicen el Evangelio y la enseñanza de los Romanos Pontífices.
El Nuevo Orden Mundial, las Naciones Unidas, la OMS, la Unión Europea, el Foro Económico Mundial, la Comisión Trilateral, el Club Bilderberg y todas las organizaciones que siguen la Agenda 2030 consideran la brutal matanza del niño inocente en el vientre materno. como un derecho, como un “pilar de la vida social”. Es emblemático y revelador que la secta de apóstatas que infestan la Jerarquía católica y han ocupado sus más altas esferas se encuentren alineadas con las posiciones ideológicas de los enemigos de Cristo, no solo en temas aparentemente inconexos –como el relato de la psicopandemia e ideología verde – sino también en la negación de los fundamentos mismos de la Ley Natural, incluido el respeto por la vida desde la concepción hasta la muerte natural.
Es desconcertante que ninguno de mis hermanos en el Episcopado, y menos aún entre los miembros del Colegio cardenalicio, se atreva a alzar la voz para condenar las palabras delirantes de Paglia y pedir su renuncia inmediata a la Pontificia Academia para la Vida.
Que los fieles, amonestados por buenos sacerdotes, se alejen de estos lobos con piel de cordero y oren al Señor pidiéndole que intervenga para salvar a su Iglesia, ocupada por un sanedrín de hombres corrompidos y pervertidos que siguen crucificando a Jesucristo en su Cuerpo Místico.

Qué gran Papa se ha perdido la Iglesia Católica, un verdadero pastor.
Copio de https://www.alertadigital.com/2012/11/25/la-iglesia-y-el-aborto-el-aborto-en-el-mundo-iv/
El primer país en legalizar esta práctica fue la República Federal de Suiza en 1916. Siguieron Checoslovaquia en 1925, la Unión Soviética en 1926 y el Imperio de Japón en 1929. Alemania lo hizo en 1933 y 1935, con una ley que, en sí misma, era una disposición racista que pretendía “la prevención de nacimientos con taras hereditarias (y) la transmisión de enfermedades hereditarias”; de la misma el PSOE copió, medio siglo después y casi literalmente, el supuesto relativo a las “graves dolencias físicas o psíquicas” y la expresión “Interrupción del Embarazo” (Schwangerschaftunterbrechung). Islandia lo hizo en 1935.
Durante la Segunda República, Cataluña se convirtió en pionera de Europa, con la ley más progresista en ese momento; fue la Ley de Reforma Eugenésica del Aborto, aprobada por decreto en diciembre de 1936 y publicada en enero de 1937 en el Diario Oficial de la Generalitat; José Tarradellas, como “Conseller en Cap”. Suecia lo hizo en 1938, Dinamarca en 1939, y Finlandia y Noruega en 1950 y 1960. En 1967 se aprobó en Inglaterra, luego en Canadá (1969) y Estados Unidos(la mayoría de los Estados en 1973, tras la famosa sentencia Roe vs Wade). En 1973 existían 44 países en los que el aborto era legal, de los cuales 19 sólo lo permitían por razones médicas, 6 incluían además razones morales y 19 más por otros tipos de razones. En la República Popular China se aprobó en 1975 una ampliación, año de su legalización en Francia y Austria; la República Federal Alemana siguió en 1976, Nueva Zelanda en1977, Italia en 1978 (veremos su caso más adelante) y los Países Bajos en 1984. Por entonces los países de más honda influencia católica (Portugal, España Irlanda) no tenían liberalizado ningún supuesto. En 1983 se aprobó el nuevo Código de Derecho Canónico. En 1985 lo hizo España, dando el testigo a Bélgica (1990), donde el rey Balduino hizo el artificio legal, que no católico ni moral, de abdicar por un día. Más tarde Colombia (en el año 2006) y Ciudad de México, junto con Portugal (2007) y otras naciones, han legalizado el aborto. …
El salto cualitativo se dio con Austria y, sobre todo, Italia, países mayoritariamente católicos, al menos nominalmente, con el consiguiente efecto dominó en otras católicas. En el segundo caso con el agravante de la peculiar relación y proximidad entre el Vaticano y el Estado Italiano, ya que el Papa es el Obispo de Roma. Giulio Andreotti, demócrata cristiano, siete veces primer ministro de Italia y senador vitalicio, director de 30 Giorni, paradigma de los “políticos cristianos” de la segunda mitad del siglo XX y siempre próximo al Vaticano -se dice que “despachaba” con el Papa una vez al mes-, votó el 26 de febrero 1976, junto con el Partido Comunista, contra la objeción de inconstitucionalidad de la ley del aborto. La italiana Ley 198, de “Normas para la protección social de la maternidad y sobre el embarazo voluntario”, es la única sobre el aborto en el mundo que sólo lleva la firma de los políticos católicos. La legalización por Italia del aborto se produjo el 18 de mayo de 1978; el 6 de agosto de aquel año murió Pablo VI. Juan Pablo II rigió la Sede Vaticana entre septiembre de 1978 y abril de 2005; conviene fijar estos extremos.
Vamos, que «la cosa» viene de lejos
Se te entiende muy bien y está claro que escribes bien informado y de buena fe pero aquellos políticos italianos y «católicos» que legislaron la impunidad del sacrilegio no eran realmente católicos. No existen católicos adoradores de Satanás.
Hoy añado:
Pablo VI, Vicario de Cristo (Papa) y Obispo de Roma, permitió que se legalizara el aborto en la diócesis que regentaba, a la vez que en toda Italia … sin el menor movimiento «político» y sin ninguan excomunión.
Puede que fuera su doble o que estubiera sometido a control mental, que todo se ha dicho, pero «formalmente» él fue el responsable.
De aquél tremendo borrón vienen muchos de los actuales locos
Pero José María, ¿y qué dices del mas-ón que precedió al supuesto papa que llevaba el efod o sea a Pablo VI o al que figura con ese nombre? Las triquiñuelas de los demonios son muy antiguas, muchas y muy enrevesadas pero el que ora, pisa el rabo a Satanás.
Al final del artículo leo con cabreo «Que los fieles, amonestados por buenos sacerdotes […]».
¡»buenos sacerdotes», dice literalmente! ¿ES UNA BURLA?
¿Quien conoce a un sacerdote que diga misa como la Iglesia manda?
¿Quién conoce a un sacerdote que confiese a los files antes de decir misa? (si lo que dice acaso sea digno de ese nombre).
¿Quien conoce a un sacerdote que preserve el Cuerpo de Cristo de las manos no consagradas?
¿Quien conoce a un sacerdote que aparte la eucaristía del pecado público y grave, de la herejía, de la apóstasía,
de la incredulidad?
Y aunque uno cumpliera todo lo que debe, ¿qué merito tendría semejante cura para ser considerado un «buen sacerdote»?
Y ojo, el que llama «misa» al acto abominable de un profanador, que se vaya pensando bien lo que le cuesta la comodidad.