Triste Pascua Militar 2022 la de unas FF.AA. multiderrotadas
Como viene siendo tradicional desde que el Generalísimo –¡cómo no!– restauró la tradición de la Pascua Militar por la cual las FF.AA acuden el día de Reyes a mostrar su lealtad al Jefe del Estado, fuera a él durante cuatro décadas o tras él a los dos reyes que, gracias a él –¡cómo no también!– le han sucedido, una amplia representación de nuestras FF.AA, con la infame Margarita Robles a la cabeza, rindieron pleitesía ayer al todavía actual monarca, Felpudo VI, un Borbón más de los pies a la cabeza.
De los discursos que se dieron y cruzaron nada hay que decir porque fueron en todos los sentidos y hasta la última coma y punto textos de una corrección política nauseabunda. Por eso pasamos en esta ocasión de perder el tiempo.
Lo que sí contemplamos ayer en los salones regios fue una patética, triste y penosa imagen de unas FF.AA. y de unos militares multiderrotados, que no son ni la sombra de lo que un soldado que se precie debe ser y parecer.
Nuestras FF.AA han sido derrotadas por el terrorismo etarra y la subversión revolucionaria catalufa, cada vez que sus caídos de sus filas y demás asesinados o mutilados son pasto de escarnio y mofa en cada pacto con el separatismo, en cada homenaje a los asesinos, en cada acercamiento o puesta en libertad, en cada cargo que ocupan en las instituciones de todo tipo, en cada unidad militar que abandona Vascongadas o Cataluña, en la piel de los que son perseguidos por querer ser españoles, hablar y aprender en español, todo ello ante la pasividad de nuestros soldados que miran para otro lado como si la cosa no fuera con ellos.
Nuestras FF.AA. han sido derrotadas por los partidos que insertaron en ellas la Unidad Militar de Emergencias por dos causas: porque tienen disponibilidad plena sin el engorro de los «convenios laborales» y porque era una forma más de «civilizar» a los militares, de avanzar en su desmilitarización, en su conversión en ONG, todo ello con la entusiasta colaboración de nuestros soldados que en dicha unidad cobran más y en las fotos con niños, en incendios, etc. quedan mejor.
Nuestras FF.AA. ha sido derrotadas porque han colaborado en el arresto domiciliario ilegal, ilegítimo, inconstitucional por parte de un desGobierno sectario, totalitario y antinacional de toda la población española durante meses, además de la imposición de restricciones a nuestras libertades y derechos humanos y constitucionales durante ya dos años, todo ello vulnerando directamente el Art. 8º de la Constitución en el que el pueblo español directamente les encomienda ser los guardianes del ordenamiento constitucional.
Nuestras FF.AA. han sido derrotadas por Marruecos, nuestro enemigo del sur, que nos invade constantemente con migrantes que no lo son, sino punta de lanza de su ejército cuya misión es la de destruirnos desde el interior, a los cuales no rescatamos, sino que traemos, alojamos, alimentamos y pagamos, así como por su invasión de nuestras aguas territoriales la explotación de cuyos cuantiosos recursos concede a empresas de otros de nuestros enemigos, y cuya fortaleza militar crece sin parar con la ayuda de nuestros aliados que nunca lo han sido, todo ello ante la traición de nuestros soldados.
Nuestras FF.AA. han sido derrotadas por unos políticos que han llenado el Ministerio de Defensa y muchos organismo militares de civiles paniaguados cuya misión es socavar la disciplina, corroer las virtudes y avanzar en la ideologización de sus miembros, inyectando ideologías de género, el marxismo cultural y otras degeneraciones que las van convirtiendo poco a poco en FF.AA. sectarias al servicio de ideas políticas antinacionales y antipatrióticas, serviles a intereses globalistas extranjeros, todo ello con la colaboración de nuestros soldados en misiones en las que nada nos va ni nos importa, acosando a naciones que en nada nos amenazan ni nos agreden o participando en conflictos bélicos que nos han costado muchos muertos y cuantiosos recursos económicos cuya gestión ha sido catastrófica hasta el ridículo final con una retirada vergonzosa de la que se intenta sacar heroicidades que no han existido, actuando cual meros lacayos o vulgares mercenarios.
Nuestras FF.AA. han sido derrotadas por unos Presidentes que se permiten el lujo de decir en público que «mañana tengo el coñazo del desfile» (Rajoy) o que «sobra el Ministerio de Defensa» (Sánchez), todo ello con el silencio cobarde y otorgador de nuestros soldados.
Nuestras FF.AA. han sido derrotadas cada vez que desde hace cuarenta años se vilipendia, estigmatiza, demoniza y persigue con falsedades monumentales a la memoria de tantos cuantos dieron su vida por España en la que fue la mayor ocasión y hazaña que junto con la toma de Granada, el descubrimiento y civilización de América, la batalla de Lepanto y la guerra de la Independencia, han visto ni verán los siglos como fue el glorioso Alzamiento Nacional y la subsiguiente derrota del marxismo y la revolución en la guerra, así como la casi aún mayor victoria en la paz posterior de cuyos beneficios aún vivimos medio siglo después, y todo ello con el silencio o incluso la colaboración de nuestros cobardes y traidores soldados.
La Historia no se repite, simplemente se parece.
Pues este era el panorama de 1873-1874:
Estados Unidos preparó su armada naval y enviaron un ultimátun a España.
Mientras España estaba en la tarea de dividirse en multitud de naciones independientes: Betanzos, Jumilla, Torrevieja, Camuñas, Alcoy, Toledo, Cartagena, Ciudad Real, Barcelona proclamó la república de Cataluña, Málaga, Valencia, Sevilla, y de Sevilla se hizo independiente Utrera, Cádiz, y de Cádiz se separó Jeréz, Granada, y de Granada se separó Loja, Jaén y Granada se declararon la guerra…: y así una gran lista de nacioncitas.
Como bien afirmó Emilio Castelar, de lo que se trataba era de «dividir España en mil pedazos». Y en sesión parlamentaria no pudo menos que gritar: «¡Ya estamos desacreditados todos! ¡Todos sin excepción!».
Luego vendrían «mejores» tiempos: Guerra Civil española 1934-1939, la Guerra que preparó, lanzó y perdió el PSG, Partido Socialista Genocida, y que ahora con el Mentiroso y el discreto Masón quieren que recordemos que ellos fueron víctimas y héroes, y que los otros, los asesinos fascitas no pasaron: eso es lo que hay que recordar.
Eso es lo que hay que recordar y no que el Mentiroso y el Masón están ahora mismo en el Poder gracias a los secesionistas y los asesinos de los secesionistas.
Increible pero cierto, a ustedes y a mí nos obligan y hasta nos multan por no llevar mascarilla en una calle por donde no pasa nadie, y quien lo hace cumpliendo las órdenes del Mantiroso son los compañeros de los cientos de asesinados.
Pregunto y recuerdo al Mentiroso y su Masón: ¿quiénes fue los asesinos que sacaron los ojos con un destornillador a esos tres gallegos que cruzaron la frontera francesa para ver una película y los asesinos -que os están apoyando- creyeron que eran policías y fueron torturados hasta la muerte? ¡Contestar, hijos de Satanás!
¡Yo os maldigo! ¡Pero mejor es que Dios os maldice!
Nuestros Ejércitos han sido también humillados, y muchísimo, por una inmensa mayoría de militares silentes o complaciéntes, así como algo más de una gran minoría cualificada de mandos.
Eso es lo más doloroso y peligros. El enemigo interno que se ha enseñoreado de nuestras filas.
Porque al externo incluso se le puede reconocer porque alardea de ello.
El interno apuñala por la espalda.
Justicia sumarísima claman nuestros antepasados y más los que fueron asesinados por la traición.
Los actuales militares de este país -me NIEGO a llamarles españoles-, son justo eso que el roquero Martín Sánchez, en su Himno de la resistencia, llama «EUNUCOS mentales».
Mi más profundo DESPRECIO para ellos y, por supuesto, para su TRAIDOR y DEGENERADO «Capitán General».