Turquía (entre otros) «ens roba»
Robar: Tomar o retener bienes ajenos contra la voluntad de su dueño.
En la necesidad se ve la amistad.
Los amigos, el dinero y los cojones, son para las ocasiones.

¿Qué seguridad nos puede dar un gobierno al que Francia le quita las mascarillas, Turquía le confisca los respiradores, Marruecos las aguas, los chinos le timan como a un idem, y que permite caceroladas contra el Ejército en su propio territorio?
Así reza un afortunado meme que circula por las redes sociales.
La sabiduría popular, digámoslo así, siempre ha descollado en nuestra Patria y éste es uno de los muchos ejemplos que podemos encontrar en estos trágicos días.
No, no es cosa de broma que nuestros aliados europeos y atlantistas nos traicionen o ignoren, como tampoco lo es que las autoridades autonómicas minen la unidad nacional y se les consienta.
En el primer grupo tienen cabida Alemania y Holanda, con sus negativas a apoyarnos (y AQUÍ) y sus críticas; la Inglaterra del Breixit, que se ha permitido mantener abierta la frontera en Gibraltar, contra el parecer de la Junta de Andalucía, hasta que le ha convenido y como le ha convenido; la Unión Europea y las compras centralizadas por ella hechas, que tendrán que esperar bastantes semanas en materializarse; y, por supuesto, Francia con su confiscación de nuestras 1.500.000 mascarillas, desde el 5 de marzo y durante 15 días.

En cuanto a la OTAN, sin olvidar lo anterior, solo nos ha ayudado Estados Unidos, pero no precisamente por los buenos oficios del Gobierno sino por los de rey. Y, curiosamente, Turquía hace cuatro días con 25 toneladas de material (250.000 mascarillas, 20 máscaras anatómicas, 750 protectores oculares, 2.000 trajes protectores EPI y 1.000 l. de líquido/gel antibacteriano).
Un inciso, a la vista de lo anterior sorprende muchísimo menos la petición italiana de ayuda a Rusia y extraña mucho más que España no haya hecho lo mismo, constándonos que ha habido ofrecimientos rusos. Y hay que resaltar que Rusia apoya a pesar de las sanciones (entre ellas España, quien encima lo hacemos contra nuestros intereses exportadores), incluso a EE.UU.
Pero, volviendo a Turquía, el pasado viernes Arancha González Laya (Ministro de Exteriores) dijo en rueda de prensa que las autoridades turcas habían bloqueado en Ankara un avión proveniente de China cargado con respiradores adquiridos por España, para poder abastecer a su propio sistema sanitario. Pero, en realidad, o “la ministro” no estaba bien enterada o “faltó a la verdad”, pues se trata de una partida de 150 respiradores de alta tecnología montados en Turquía con componentes chinos, los cuales fueron comprados por 3.000.000 € por la Junta de Castilla-La Mancha y pagados, y, una vez embarcados en el avión, bloqueados durante una semana. Emiliano García-Page ha exigido al Gobierno de España que emita una queja diplomática formal ante Turquía, pero el Gobierno, por boca de González Laya, ha dicho que “en un plazo prudencial, en el plazo de unas semanas, volverá a ponerse ese material a disposición de España” … lo cual ha sido después desmentido por Turquía, quien no entregará los respiradores.

Vox, que en un comunicado ha expuesto magníficamente las diez razones por las que no volverá a hablar con Sánchez, culminado por exigir al Gobierno “su dimisión, dando paso a un Gobierno de Emergencia Nacional”, ha pedido también la retirada de nuestro embajador en Turquía.
Pero, se quedan muy cortos García-Page y Abascal. Hay que pedir una vez más el cese de las inoperantes ministras de Exteriores y Sanidad, presentar quejas formales a ante OTAN y los tribunales internacionales y, por último y de forma inmediata, ordenar la urgente retirada de la Batería de Misiles Antiaéreos MIM-104 Patriot que tenemos desplegada en Adana. La denominada Operación Apoyo a Turquía (AT) comenzó en 2013 para Usa, Alemania y Holanda, incorporándose luego Italia y España (en 2015), siendo nuestros artilleros los únicos que continúan en la actualidad … ¿para hacer frente a la aviación rusa? Se da, además, la circunstancia de que en este mes se cumple la última (10ª) prórroga de seis meses que ha firmado España. Y, una vez retirada, su lugar de despliegue debe ser Canarias, para disuadir a Marruecos de sus ambiciones y frenar sus insultos.

Por último, preguntémonos ¿por qué nos arrebatan material médico de extrema necesidad, nos niegan apoyos y roban unas aguas españolas basándose en un territorio, el Sáhara, que, según la ONU, aún está pendiente de descolonizar por España? ¿Por qué no les suceden estas aberraciones a otras naciones?
La respuesta no puede ser más sencilla y odiosa.
Cualquier situación por aterradora que sea puede empeorar, se dice en la milicia. Siendo la de España dantesca en lo sanitario, social, económico, político y de cohesión interna, nuestra debilidad internacional puede agravar dantescamente nuestros males.

Desde luego, dada el comportamiento de nuestros «aliados» de la OTAN, ante las auténticas agresiones de Marruecos y Argelia a nuestras aguas y subsuelo, y dado que Marruecos lleva prácticamente un año con la movilización general decretada (servicio militar obligatorio para hombres y mujeres), el contigente de esa misión, casi siempre formado en su mayor parte con personal del Regimento nº 73 de Cartagena-Valencia reforzado por otras unidades de artillería antiaéra debería cambiarse al envío a Canarias de una batería Patriot, más una sección a Baleares.
Completamente de acuerdo con lo expuesto.
Y especialmente con la propuesta de traslado inmediato de los medios antiaéreos a Canarias: “Es justo y necesario”
Y además, urgente.
El problema de la España actual es que “a quien no sabe a donde va, ningún viento le es propicio”
Y si a ello le sumamos que los rumbos decididos por el comandante de la nave y su “segundo” no son ya dispares, sino contrarios, el resultado no puede ser otro que navegar dando bandazos… hacia la rompiente y el naufragio.
Mientras que los tiburones internacionales se frotan los dientes.
¿Solución? Desembarcar al comandante y al segundo antes de que sea demasiado tarde.
No hay otra.
«España como sujeto de Derecho internacional en cuanto a Estado, y España en su dimensión de «potencia» o de sus capacidades militares, lleva como treinta años haciendo literalmente «el canelo».
Cuando tu pones a una Ministra de Defensa como la que tenemos, o con una barriga de 7 meses de gestación a pasar revista a las tropas y a un General le llama Capitán para que mande firmes, como hizo la Ministra de Defensa de Zapatero, esa imagen entre rocambolesca e inimaginable en países donde las fuerzas armadas son algo que se toman muy en serio, se miran a la cara y de la risa que les entra, -mitad risa mitad sobresalto-, se atragantan el bocado de bocadillo de la merienda que se les va por el otro lado, hasta el extremo de casi necesitar la maniobra de Heimlich, porque hacer el canelo y el payaso de esa manera no se le ocurre ni al que asó la manteca. Yo pongo la mano en el fuego que Zapatero nombró a Carmen Chacón únicamente porque estaba de 7 meses, como manera masónica de deshonrrar y mancillar a nuestras Fuerzas Armadas y cargarse con esta imagen la poca autoestima y el poco crédito internacional que le quedaba, como esa pareja de lesbianas o de maricas que entran a una iglesia a darse un beso de tornillo solo para provocar. Literalmente no pudo ser otra la intención de este canalla, estoy convencido que no hubo otra intención más que esa: la de escandalizar y mancillar el honor que quedaba en las Fuerzas Armadas.
Para el que asiste a semejante espectáculo, el descrédito no se agota en la ministra con la barriga y en el Gobierno que designa a tal despropósito para dirigir uno de los ministerios más importantes en toda nación que se precie, sino que el descrédito se extiende a la cúpula militar de ese país que consiente no sólo ser mandada de forma tan lamentable, sino tener semejante icono como imagen de lo que los Ejércitos son, porque con tal consentimiento se demuestra que son un cero a la izquierda. Lo que en términos coloquiales se denomina «una puta mierda».
La fama la tienen las mujeres «florero», que son esas tías muy guapas, marcando gluteos sin ropa interior, y muy tontas, ligeritas de cascos ellas, que suelen tener maridos 30 años mayores y con mucho dinero (porque son tontitas, pero no tanto). Pero de esta forma, con la «Democracia» se inventaron los «Generales florero» , que como sus homónimas mujeres están nada más que para figurar, con sus medallitas que quedan muy bien en el uniforme los colorines de las condecoraciones. Su especialidad es acercarle un sillón al Señor Ministro para que se siente, en esto los tíos son la pera de buenos, están al quite de atentos.
Después se inventaron los Comandantes o Capitales florero que son esos tíos que en la Copa del Rey se colocan de uniforme detrás del Rey, con un maletín y que permanecen impertérritos mientras los separatistas silban a los acordes del himno nacional y se acuerdan de la madre del Rey. La fama la tienen los comprimidos de Angileptol, y de Lizipaina, pero estos tíos se tragan por ese gaznate que tienen una grúa de obra de esas de 70 u 80 metros o un poste de telégrafos o una noria de feria, y yo no sé cómo lo hacen pero es que ni se arañan la garganta lo más mínimo, qué tíos. Eso se consigue de mucho despachar con los políticos y de hacerles la pelota, al final la garganta coge una elasticidad que ya quisieran los que practican taekwondo.
Además un país como España que en lo militar cede en todo incluso con Andorra. Que los Moros de Marruecos se ponen chulos, cedemos y les damos mas subvenciones. Que se ponen chulos los de Argelia, lo mismo., Que Gibraltar ataca a una patrullera de la Guardia civil, no hay problema le abrimos un disciplinario a los guardias y le hacemos un 30% de descuento en el hormigón para hacer bloques de esos que tiran al mar y robarnos todavía más nuestra plataforma continental. Y un larguísimo etcétera.
A base de bajada de pantalones no un día o dos sino sistemáticamente y con todo contrincante, incluidos los cuatro pelagatos que desembarca hachís en la Línea de la Concepción, pues claro al final la voz se corre y ahora a España le llueven las collejas. Cuando demuestras que como sujeto del Derecho Internacional has pasado de la épocas gloriosas del Duque de Alba o de José Mª Castiella a la actual de Moratinos, Trinidad Jiménez y Arancha González Alaya (que con esas gafitas parece la tonta de la clase), y que eres una mierda como pais, y en el aspecto militar tus capacidades se reducen, en el ámbito extgerior a trabajar de segurata para el poder mundial allí donde te mande y si Israel te mata al Cabo Soria te achantas como corresponde a un 0 a la izquierda, y en el ámbito interno las capacidades se reducen a hacer la Legión molinillos con el cetme en el puerto de Málaga o a cantar el novio de la muerte en el patio de armas, es decir en el salón, viviendo de las rentas de la sangre de otros. Y hasta en Cataluña cuatro sans culotte se enfrentaran a pedradas y a cocteles molotov con la policia y les echan un pulso y lo ganan. Con la Guardia civil además el día del referéndum ilegal saliendo huyendo de poblaciones rebeldes mientras el populacho separatista (que no tiene medio asalto con el «santiago» de Cudeman) les perseguía. (Qué tiempos aquellos del Frente del Este, cuando los soviet atacaron por sorpresa un hospital de campaña lejos de la línea del frente y sin protección, y mataron hasta a las enfermeras, y localizado por la División azul a la unidad enemiga que había cometido tal hecho, se la atacó de noche pero con la orden de hacerlo a arma blanca, para matarlos con la crueldad que ellos habían utilizado , y todos los enemigos fueron pasados a cuchillo).
Cuando tienes esta actitud de cuando defendíamos la civilización cristiana en el Frente del Este, como Nación y como Ejército, los EEUU al final en 1945 se lo piensan mejor y con la flota frente a Valencia prefieren no invadirnos, porque posiblemente la victoria hubiera sido suya dada la apabullante superioridad y capacidad industrial y de recursos de los EEUU, pero conscientes del espichaque de unidades que iban a sufrir en la invasión, hicieron números y concluyeron que le iba a traer más cuenta dejarnos en paz. Pero claro como ahora hasta los delincuentes del campo de Gibraltar que se dedican al desembarco de hachís tienen mejor armamento que las Fuerzas de seguridad, y que aquí das un golpe revolucionario y secesionista en Cataluña y a los tres meses de la sentencia estás dando clases en la Universidad de Barcelona el olor de multitudes, pues claro al final se corre la voz de que España es una especie de casa de putas, que el único delito que se persigue, -eso sí, con todo rigor-, es negar el Holocausto o criticar a Pablo Iglesias, que en esto los Fiscales están intratables (en lo de las residencias de ancianos no, y en lo de Zapatero y los papeles de ETA tampoco, pero con lo del holocausto es que les va la vida en ello), pues se corre la voz y ya marica el último:
-Marruecos invade las aguas canarias,
– Argelia las de la Baleares,
– Francia se queda con las mascarillas,
– Turquía con los respiradores,
y esto no ha hecho más que empezar, porque esto es como las pitadas al Rey y al Himno de España en los campo de fútbol, por quedarse como un pasmarote él y el Comandante florero que se pone detrás con el maletín y las medallas en el uniforme, sin hacer nada, una vez y otra sin que pase nada, pues al final los separatistas han ido a más, y más y mas. Si se hubiera reaccionado a la primera, nos habríamos ahorrado el proceso revolucionario que se vive en Cataluña de guerra abierta desde octubre de 2017. Y con esto va a pasar igual, por no poner pie en pared en su momento, al final nos vamos a volver a ver otra vez todos apretados en Covadonga.
Un ejercito de plastilina como el nuestro, pierde su función disuasoria, y al contrario es una invitación a que nos roben la cartera.
Porque si quieres la paz, has de estar preparado para la guerra y sólo se está preparado para la guerra cuando se tiene todo lo necesario y más para ganarla por goleada, de modo que los lobos de tus enemigos vean los filos de tu acero y prefieran no arriesgarse. Si vis pacem, para bellum.
Hay que felicitar al autor por el artículo y por arriesgarse a escribirlo cuando otros se han pasado directamente al enemigo.