Verdugos y víctimas
El diario El País informó, el 19 de junio de 2018, del levantamiento de la fosa común núm. 94 del cementerio municipal de Paterna (Valencia) donde estaban enterrados víctimas de la represión franquista.
Otros medios de información publicaron, el año pasado, que el gobierno de Valencia y el ayuntamiento de Paterna van a construir un memorial, en el mencionado cementerio, con una inversión de un millón de euros, «para la difusión y divulgación de los valores democráticos que representa, en concreto, los derechos de las víctimas» y que «sirva de recuerdo para homenaje y recuerdo a las víctimas de la dictadura franquista que murieron en defensa de la democracia».
Elogiosa iniciativa que impulsa a conocer los méritos y las circunstancias vitales de los ejecutado y sepultados en dichas fosas comunes, ahora exhumados por un equipo de arqueólogos y antropólogos, financiados por la diputación de Valencia.
Emprendida la investigación pertinente, con los supuestos anteriores, nos tropezamos con una inesperada realidad: el relato oficial no concuerda con la realidad histórica publicada por los medios de comunicación. Como botón de muestra, citaremos el caso de Vicente Torregrosa Grau, uno de los sepultados en la citada fosa 94, natural de Játiva, carbonero y afiliado a la FAI. Efectivamente, fue condenado a la pena capital, en la sentencia de la causa núm. 6835 de Valencia, que dio como hechos probados, que «tomó parte en numerosos hechos vandálicos, entre los que se destacan el realizado cierto día del mes de agosto de 1936 que unión de otros individuos, todos ellos armados, obligaron a subir en un coche que llevaban preparado al efecto a D. Rafael Monllor, al que trasladaron a las inmediaciones del Balneario de Bellús y haciéndolo descender del coche dispararon sobre él dejándolo muerto y el realizado días después que en un coche y acompañado también de otros individuos, se dirigieron a las inmediaciones del pueblo de Vallés, esperando el paso por dicho lugar de Don Gonzalo Viñes y Don Juan Cirujeda y en el momento que estos lo hicieron, dispararon sobre ellos ocasionándoles la muerte».
La Causa General en la población de Játiva, que se puede consultar en el Plan de Archivos Españoles (PARES) confirma dichos asesinatos.
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P. Rafael Monllor Casasempere El sacerdote Rafael Monllor Casasempere, nacido en el año 1880 en Alcoy, donde había fundado las Escuelas del Ave María, un reformatorio de niños, catequesis e instituciones de Acción Católica. Fue detenido, cuando iba darle el último Sacramento a un moribundo, interrogado en el comité local de Játiva y asesinado en las cercanías de Bellús. Su cadáver fue encontrado abandonado el 28 de septiembre de 1936, con un tiro en la cabeza.
- Gonzalo Viñas Masip, sacerdote canónigo de 54 años, y Juan Cirujeda Pla, procurador de 50 años y sin filiación política, fueron asesinados en el río Valls (Játiva) de sendos tiros en la cabeza y en el mismo día (10 de diciembre de 1936).
Igualmente se puede constatar que, en la misma fosa, Rafael Ortiz Hernández, vecino de Ayora y afiliado a la UGT, fue condenado en la causa (4093-V) por matar a Miguel Lodroño Martínez, jornalero de 36 años; Pedro Cámara Lodroño, propietario de 46 años; Primitivo Ibáñez Campo. Propietario de 62 años; y Enrique Teruel Ávila, sacerdote canónigo de 64 años. Los dos primeros afiliados a la Derecha General Valenciana y todos muertos el mismo día, el 1 de octubre de 1936.
La página digital «En recuerdo de todas las víctimas» (enrecuerdode.com) que se autodefine como «un medio para mantener viva la memoria de los fallecidos víctimas del error humano», incluye en Játiva conjuntamente a Teruel, Cirujeda, Viñes y Torregrosa. Asimismo, ocurre con Rafael Ortiz Hernández con sus tres víctimas; y también en otros muchos casos de las fosas comunes de Paterna, como se puede acreditar fácilmente. Pero, habrá que convenir que unos fueron solamente víctimas y otros, antes de ser víctimas, fueron verdugos. Sería, además, lo mismo que igualar a las víctimas del terrorismo con los asesinos de ETA.
Para El Debate
Muy oportuno el recordatorio mi general.
Oportuno e imprescindible.
Cuando la infame ley 52/2007 de la “revancha histórica” que quiere ahora “perfeccionarse” con la todavía más abyecta “ley de la memoria democrática” pretende elevar a los altares laicos a los asesinos, que pagaron con su vida -tras ser juzgados- los crímenes que habían cometido.
Las víctimas fueron asesinados…. y sus verdugos ajusticiados.
Y además la ley que se les aplicó, y por la que fueron sentenciados, era precisamente la de la República.
Solamente un Sistema corrupto y degenerado, puede aprobar unas leyes que ensalzan a los asesinos humillando a sus víctimas y a sus deudos.
No se puede esperar nada bueno de estos criminales socialistas y comunistas ni durante nuestra SUBLEVACIÓN de 1936, ni después de la guerra donde ALGUNOS de esos criminales fueron condenados y ajusticiados mediante juicios justos o que muchos de estos torturadores no sufrieron ni juicios ni castigos.
Lo he comentado muchas veces en estas páginas: mi tío José María estuvo preso varios meses en el barco-prisión Cabo Quilates del Gobierno Vasco-comunista. Le sacaban a fusilar todos los días, algunos los mataban y al resto los volvían a sus celdas, repitiendo la operación sin descanso de manera que la tortura era infinita. Como único alimento les daban, en nombre de la Memoria Histórica, cáscaras de naranjas. Y solo eso.
Recuerdo en mi Memoria Histórica que siendo muy pequeño y yendo por una calle de San Sebastián, mi madre señaló a un individuo diciéndome : ese que ves es el torturador de tu tío José María. La imagen se me quedó grabada durante mucho tiempo y no pude entender como aquel tiparraco asesino pudiera pasearse en libertad total.
Enhorabuena por refrescar a mucha gente la calaña de estos criminales.
Criminales autores HOY de más de 1.300 asesinatos que constan en el auténtico Expediente Royuela que ningún Juez, ningún policía ni Guardia Civil se atreve a investigarlo y porque la sombra de estos asesinos del PSOE y PCE sigue actuando todavía HOY.
La guerra de Ucrania es un juego de niños comparado con el Expediente Royuela, que es, además, la punta del iceberg de un número mucho mayor de crímenes. Memoria Histórica que algún día habrá que explicar.
Y esta putrefacta «constitución» que permite genocidios como el aborto, la eliminación del adversario político, del que se atreve a criticar actos de corrupción o simplemente asesinar como capricho, es la demostración que la llamada Democracia es un gobierno corrupto y perverso.
Corrupto desde su inicio porque los mal llamados herederos del Régimen de Franco, como Suárez, Juan Carlos el bobo perjuraron de sus principios sin rubor alguno. Y Suárez desde la primera elección trampeó los resultados como lo hicieron todos los corruptos presidentes de los fantásticos Gobiernos que nos han llevado a una quiebra de dimensiones nunca vistas.
No soy ni he sido franquista, ni nadie de mi familia pero hemos vivido lejos de la política como prometimos a nuestro abuelo José María Caballero Aldasoro, NUNCA participar en política. Mi abuelo fue marino de guerra, Ingeniero Industrial y Abogado, autor de la Sublevación del 19 de julio de 1936 y como buen español y católico NO quiso mover un dedo contra Franco. Lo mismo hizo D: Emilio Mola y Vidal amigo y coautor de la Sublevación del 19 de julio de 1936, en concreto a las 13h00.
En estos momentos en que nuestra PATRIA, ESPAÑA, que se encuentra en su fase final, los que creemos en los sacrosantos principios de DIOS y PATRIA deberíamos organizar un frente común lejos de los partidos políticos.
Es posible que sea tarde, pero la esperanza nunca se debe perder.
Íñigo Caballero
Donostiarra y carlista desde que nací
Muy buen artículo. Enhorabuena a su autor.
Todo lo que hacen los rojos es siempre en fraude de Ley, para mentir y tergiversar la realidad. Son los maestros de la manipulación y la mentira.
Las llamadas «fosas de Franco» tienen el recorrido de sacar los expediente judiciales de los rojos y que se sepa porque los condenaron a muerte. Por eso se guardan muy mucho de dar a conocer los crímenes que cometieron lo que hipócritamente se presentan como víctimas, lobos con piel de cordero. La farsa se mantiene por muchos a sabiendas de su injusticia, farsa en la que están involucrados muchos que por razón de sus cargos deberían defender la Verdad y la Justicia.