VOX, más que bien
VOX, muy bien, pero que muy bien, porque de la nada a 24 disputados en una España arrasada desde hace cuatro décadas, es más que bien.
Dicho lo dicho, que ratificamos, hay que reflejar que las caras de decepción se deben a que se pusieron demasiadas esperanzas en ese milagro, qué digo, milagrazo, que todos deseábamos, esperábamos y sabemos que se necesitaba; bueno, menos los puros e inmaculados, los «patriotas» y «católicos» que se quedaron en casa para no mancharse las manos y perder su virginidad y pureza.
El resultado es extraordinario, lo que algunos no aprecian cegados por la inespearada, inmerecida y abusiva victoria del patético Sánchez, el PSOE criminal de siempre y la anti-España que no cesa; separatistas incluidos.
Pero es que, señores, llevamos cuatro décadas de siesta, de dejar hacer, de traidores peperos, de machaque y degeneración, y en tales circunstancias era imposible más.
Por lo dicho, ¡enhorabuena a VOX!.
Ahora, por favor, que no pase como siempre y falte el tesón, la perseverancia, la voluntad de lucha y de vencer, que no se ganó Zamora en una hora, ni España se puede ganar sólo en unas elecciones, ni mucho menos; hay que desechar esa tendencia española a invertir un euro y querer obtener beneficios de inmediato y de tal calibre que nos permita dejar de trabajar y comprarnos un yate.
Y… aprendamos de la anti-España, que de nuevo ha puesto en juego esa máxima de que hay que llegar al poder, sea como sea, incluso con aquellos a los que no tragamos, y entre ellos los hay, porque si no es así nada se hace, nada se influye, nada se consigue. Han cerrado filas una vez más; otra cosa es que acabarán dándose de tortas, como siempre, también.
Ahora hay que gestionar esta gran victoria, que lo es, hay que hacer la lectura adecuada, hay que ponerse manos a la obra para que la reacción que suponen esos de la nada a 24 escaños, se consolide en las municipales y autonómicas.
Ah, y no hay que ablandarse, sino endurecer el mensaje, consolidarlo e ir a por el enemigo, a por esa anti-España que, en realidad, ya lo verán, tiene hoy en día los pies de barro y sólo hay que empujar y empujar y terminará cayendo.
Muy bien por VOX, ánimo y al combate.

Extraordinario artículo.
He comentado en el artículo anterior de D. francisco B. Ayuso, pero lo dicho en ese artículo podría decirse igualmente en este otro.
Arriba España.