Y vino a cantarlo a España

Ayer hubo un gran estreno

En el «congrioeso» de España,

Estaba el hemiciclo lleno,

Lleno hasta las telarañas.

 

Se exponía en el certamen,

del festival de las Cortes,

un clásico de Bizet: Carmen…

Aunque con varios aportes.

 

Para empezar, la gitana,

No era ni guapa ni nada.

Más bien baja, quizá enana.

Sin faralaes: iba en chándal.

 

En cuanto al cabo José,

Ni era cabo, ni soldado.

Era una masa, no sé,

De un montón de enajenados.

 

Cada cual de esos comparsas,

Que enamoraba la diva,

Evidenciaba la farsa,

Según se venía arriba.

 

Con retraso la «soprana»,

(Venía de hablar con UNO),

Y barba de una semana,

Cantó a Yahvé y a Saturno.

 

A Shiva y la Pachamama.

Fue un aria muy sincretista.

Y es que hasta el dálai lama,

Le mola a este mundialista.

 

¡La libertad religiosa!

Está en peligro, tronaba.

En Ucrania, ¡ay, qué cosa!

Y vino a cantarlo a España.

 

Traducía la actuación,

Una que nació en Patones,

Para cumplir tal función,

Risto las tiene a montones.

 

Del boli y su utilidad,

Versó el subsiguiente fado:

Con él escribió Ana Frank,

Antes de haberse inventado.

 

Siguió «nuestro» hábil soprano,

Mencionando una masacre.

¿Paracuellos? No, no, no.

Guernica… De puta madre.

 

Comparó ese bombardeo,

Con Mariupol y su drama.

Señal de que el fariseo,

Algo sabe de ambas tramas.

 

Ya cuando cantó en Holanda,

Mentó al Prudente con saña.

Fue un tirano, él y su panda…

Y vino a cantarlo a España.

 

Ya ganado el auditorio,

A la causa de ese necio,

Reclamó a su repertorio,

Que cerrarán tres comercios.

 

«Porque trafican con Rusia»,

Declamó en el tercer acto,

Antes que todas sus furcias,

Aplaudieran sin recato.

 

(Por mi que a Porcelanosa,

Se la coma en empanada:

No tardó ni media hora

En decir que a Rusia, nada).

 

¿Y el fuel? Qué a Putin ninguno.

¿Y quién coño se cree el Rosa,

Payaso, zafio y pinguino,

Para exigirnos tal cosa?

 

Pero en fin, de este difuso,

No es lo peor la patraña.

Lo peor es que el aplauso

Sonó al cantarla en España.


4 respuestas a «Y vino a cantarlo a España»

  1. Algún seguidor de El Español Digital, entre los que me consta que hay personas muy bien informadas, ¿puede ilustrarnos con un perfil biográfico del actual presidente de Ucrania?
    Tal vez eso explique el unánime apoyo que está recibiendo, más allá de por ser presidente de un país invadido.
    Puesto que en situaciones similares, otros presidentes o jefes de estado, no han disfrutado de tales apoyos mundiales y mundialistas.
    ¿Por qué será? que decía ingenuamente “La Bombi”

  2. Gracias al editor y su espléndido reportaje fotográfico, fidedigno (no como el montaje de Bucha. Hay una errata en el texto: sobra el final
    ‘Que de histérica memoria
    En Ucrania, ¡ay, qué cosa!
    Y vino a cantarlo a España».
    Saludos

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