Margarita «mofletes»: chunga, inepta y perniciosa
El ex-comisario Villarejo dijo hace no mucho meses que Margarita «mofletes» era «chunga, inepta y perniciosa».
Ella se tomó como un halago dichos calificativos aduciendo que venían de semejante reconocido sinvergüenza, sin darse cuenta, en su estúpida soberbia, que Villarejo, aunque sin duda es eso y mucho más, no por ello tiene sus méritos, ya que para haber sido el delincuente que sin duda es, hay que tener ciertas virtudes como, entre otras, una gran capacidad para captar las esencias de los demás, pues de otra forma nunca habría podido jugar con todos, aprovecharse de todos y ahora tener a casi todos pendientes de un hilo.
Si miramos en el diccionario vemos que chungo es tener mal aspecto, ser de mala calidad, difícil y enrevesado; que inepto es sinónimo de necio, incapaz, negado, nulo y no apto; y que pernicioso es ser dañino, perjudicial, maligno y nocivo.
Si reconocemos las virtudes de Villarejo, que de tonto ni un pelo, y le damos crédito a la hora de penetrar en la psique de las personas, porque de otra forma no hubiera tenido tanto éxito en sus «negocios», y observamos los apelativos que empleó para definir la personalidad de Margarita «mofletes», vemos que no dijo que fuera incorruptible, honrada, seria, cabal, eficaz, beneficiosa, etcétera, y que por eso no había logrado llevársela al huerto, metafóricamente hablando, claro, sino que era «chunga, inepta y perniciosa», todo lo cual encaja a la perfección en el proceder de «mofletes»; Villarejo añadió además que fue ella quien le encargó el informe para cargarse a Baltasar Garzón no por su continua prevaricación, lo que hizo un tribunal sin tener que recurrir a Villarejo, sino por todo lo contrario.
Desde que la «mofletes» desembarcara en el ministerio de Defensa, no por casualidad, sino por arte y parte de su mentor, Pedro I «el profanador» y «el okupa», cuyas acciones vienen demostrando que es también un inepto, pernicioso y chungo personaje, esta individua, de quien Ussía ya dijo que tenía «los papos asimétricos» y cuya carita cuando la vemos, no por placer, sino por obligación profesional, nos recuerda cada vez más a la de un bóvido mareado, no ha hecho nada más que dos cosas: meter la pata y ponerlo todo patas arriba.

Para lo primero basta con repasar la siguiente relación de barbaridades y estupideces: el fiasco de la venta de bombas a Arabia Saudí; su inquina sancionadora contra la libertad de expresión de los cinco reservistas de los más de mil militares que firmaron la declaración en defensa de la figura militar de Francisco Franco; el maltrato y patada a un Vicealmirante a quien la Justicia ha amparado; el chorreo a los españoles que expresaron libremente su oposición a Sánchez en el desfile; el otro chorreo a los líderes políticos que exteriorizaron su apoyo a la Guardia Civil en Alsasua; el mete y saca de la presencia de las FFAA en la feria de Barcelona; el maltrato de los derechos de un teniente coronel, lo que le ha costado la correspondiente denuncia, y la patada al jefe de gabinete del JEMAD –al cual, el Gral. Alejandre, todavía se le busca para que dé la cara por su inmediato subordinado–, por el hecho de haber expresado su opinión en un whataspp privado sobre Adoración Mateos, directora de personal de Defensa, a la que tachó de «bicho», lo que hasta los pasillos del ministerio saben que lo es. Por eso, por todo lo mal hecho hasta el momento, es fácil concluir que las meteduras de pata de la «mofletes» hacen bueno lo dicho por Villarejo: que es «chunga, inepta y perniciosa».
En cuanto a lo de que está poniendo a Defensa patas arriba, basta con recordar que ha recortado hasta límites nunca antes vistos, hasta dejar en la práctica indigencia, los presupuesto para instrucción y maniobras de los tres ejércitos, cuya operatividad, ya de por sí más que mermada, roza lo vergonzoso –lo denunció el propio JEMAD en el Congreso–, y que en un ataque de megalomanía se ha apropiado del CNI y de la UME, pero no contenta con tamaños desafueros, acaba de crear un nuevo departamento al que ha denominado «División de Igualdad y Apoyo al Personal», que en realidad es la misma División de Servicio de Apoyo al Personal a la que sustituye, pues tiene las mismas funciones que tenía esta última –incluida la de «protección contra el acoso» (¿?)–, sólo que, eso sí, con un nombre más… feminista, sufragista, emancipador, modernista, podemita, mundialista, ecologista y… demagógico.

Departamento, nuevo sólo de nombre, al frente del cual, como no podía ser de otra forma dada su mentalidad, la «mofletes» ha colocado a una mujer –¿por qué no a un hombre? ¿es que Magarita «mofletes» es misándrica?–, la Teniente Coronel del Cuerpo Jurídico Begoña Aramendía, cuya carita… ¿es hombre o mujer? dice mucho también, no por su valía profesional y personal, creemos, sino por mérito «sexual», o sea, por ser mujer, la cual con aceptarlo ya se define, al tiempo que se mete en la boca del lobo, o de la loba, porque si cumpliera con las misiones que se le asignan, debería comenzar por obligar a Margarita «mofletes» a derogar las desiguales normas –las últimas de la propia ministro– que favorecen a las mujeres frente a los hombres en las FFAA, o sea, que crean desigualdad, así como a reconocer que hombres y mujeres no son iguales –sólo en dignidad como seres humanos–, por mucho que las aberrantes feministas de todo pelaje, como la «mofletes» y Begoña Aramendía se empeñen en lo contrario.
La realidad es que todo lo anterior ocurre por lo que venimos denunciando reiteradamente desde hace tiempo:
* Que además de que Margarita «mofletes» es una totalitaria, intolerante, inestable y caprichosa indivuda, evidencia padecer de «trastorno explosivo intermitente» –vulgarmente ira descontrolada–, de «incomunicación esférica» y de «entorno abstracto», patologías que Villarejo detectó cuando trató con ella y que definió de manera más burda, pero no por ello menos acertada, con su ya emblemática triada «chunga, inepta y perniciosa», lo que la lleva a cometer los típicos excesos de los que gustan de la dictadura y el terror, principalmente a despreciar y maltratar a sus subordinados, lo que la convierte, como a Adoración Mateos, su directora de Personal, en un bicho, más aún, en un mal bicho.
* Pero, todo hay que decirlo, también porque se ha hecho cargo del ministerio de Defensa, cuya cúpula, y la inmensa mayoría de los mandos superiores de los tres ejércitos –y no tan superiores–, hace mucho que decidieron que obediencia es sinónimo de sumisión, que neutralidad es lo mismo que inhibición, que la disciplina está por encima del honor y no al revés, que a España se la defiende pelando guardias en Afganistán, Líbano o Letonia y no dando la cara en Barcelona, Alsasua, Ceuta o Melilla, que… el verbo traición no existe, optando por dar preferencia a sus cargos, sinecuras y prebendas, a salir en las amañadas fotos propagandistas de twitter, a cobrar dietas, a fingir negocio y a parecer que hacen sin hacer.
Margarita «mofletes» es, como dijo Villarejo, «chunga, inepta y perniciosa», está cortada por el mismo patrón que su jefe, Pedro I «el profanador» y «el okupa», profesan ambos ese marxismo fascistoide nostálgico de la checa y el «paseo», de los comisarios políticos y de aquel Manuel Azaña que quiso triturar al Ejército llevado sólo, como ella, de su esquizofrénica soberbia, por todo lo cual, la «mofletes» es peligrosa, carece de empatía para con los demás, torticera, dañina, repleta de complejos y desmedida ambición que la llevan una y otra vez a cometer tropelía tras tropelía.
Mal hacen los mandos de Defensa en no poner coto a semejante espécimen, porque no sólo va a triturar y a dejar como un erial a las FFAA, sino que se va a llevar a todos ellos por delante… lo mismo que Sánchez está haciendo con España y con los suyos propios.
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Muy bueno, como siempre.
Y un buen resumen de actividades.
Recuerdo otros logros:
Vender bombas guiadas (y no reponerlas) a Arabia Saudí, para luego decir que no, poner en peligro los astilleros de Cádiz, y volver a desdecirse.
Rebajar la altura de los aspirantes a soldado a mínimos históricos, para favorecer a las mujeres.
Y más que nos regalará por Reyes (o republicanos)
Estimado seguidor: Margarita Robles es peligrosísima, es vesánica, es una bolchevique que además odia a las FFAA. Saludos cordiales